martes, 24 de marzo de 2009

Montequinto - Sevilla - Guillena - La Algaba - Sevilla - Montequinto

Mañana fresca como todas las de esta primavera. Salgo de Montequinto por el puente del metro para encaminarme hacia la Pablo de Olavide donde cojo el carril bici de Sevilla que me lleva hasta el Parque de Mª Luisa. Paso por su lado y al lado de la Pza. de España y vuelvo a coger el carril bici que me lleva a la Catedral. Allí busco a un amigo de Castellón que lo conozco del foro. Una vez que lo saludo emprendemos la marcha se le rompe la cadena.

Hemos quedado también con Manolo otro compañero del foro. El nos indica que en la calle Arjona hay una tienda de bicis. Salimos andando por las calles del centro en busca de la tienda. Llegamos justo cuando la están abriendo, con lo que se la arreglan y ya puede empezar su Vía de la Plata.

Oscar ha empezado la Vía desde Cádiz y ya lleva dos días de rutas. Salimos de Sevilla y llegamos a Camas que la cruzamos y después Santiponce.

Hoy por ser lunes se encuentra cerrado las Ruinas de Itálica. Al pasar por ellas seguimos un km. por carretera y por fin cogemos camino. Al comienzo son unos toboganes de piedra suelta pero el problema mayor es el viento. Por fin llegamos al Arroyo donde nos descalzamos y lo cruzamos. Sus agua están heladas.

En la otra orilla nos calzamos y proseguimos hasta Guillena donde nos tomamos unos refrescos. Al continuar la marcha el viento es claramente en contra lo que le hace pedalear muy lento. A la entrada al Polígono Industrial le deseo buen camino y le dejo continuar su camino ya que son las 12 de la mañana y a las 2 debo recoger a mi hija del colegio.

Cambio los planes de mi ruta y me dirijo por carretera hasta Torre de la Reina y a su salida cojo un carril de tierra que me lleva hasta las afueras de La Algaba. Busco su carretera que va a Sevilla y cojo el carril bici que tiene. El ritmo es fuerte pero es que no dispongo de mucho tiempo si quiero llegar.

Llego a Sevilla por San Jerónimo y bordeo el barrio para ir al Puente del Alamillo. Allí cojo de nuevo los carriles bici de Sevilla que me llevan al Parque de Mª Luisa.

Cruzo el parque y reemprendo por carriles para cruzar Sevilla de Oeste a Sur hasta llegar a la Pablo de Olavide donde cojo la carretera nueva del Hipódromo y al los pocos mts. la abandono para dirigirme hacia casa.

Parece increíble pero he llega a la 1,30 con lo que me ha dado tiempo de ducharme, comprar el pan e ir a buscar a mi hija.

sábado, 14 de marzo de 2009

Variante Dip. Aznalcollar

Por fin hoy íbamos a hacer una ruta de las que nosotros denominamos de alta montaña. Hemos quedado en el pueblo de Aznalcóllar Mario, Eduardo y Paco. Jualián no ha podido venir por estar cansado por motivos familiares.

La mañana estaba muy fresca pero yo iba con maillot corto y culotte corto pensando que a lo mejor era demasiado atrevido, pero al llegar me dí cuenta que todos íbamos igual.

Salimos de Aznalcóllar callejeando por sus calles y en bajada pos su carretera que va hacia El Alamo y El Castillo de las Guardas. Al llegar al cruce de carreteras seguimos hacia El Alamo. Seguimos bajando hasta cruzar el Arroyo Tamujoso. Empezamos a subir pero por asfalto que no abandonamos hasta cruzar el puente que nos eleva por encima de las aguas del Embalse del Agrío. Ahora hay una bajada que nos lleva a otro puente que cruza el Arroyo de la Sebastiana y donde realmente empieza la subida al Puerto de la Cruz.

Se hacen dos grupos, Mario y Eduardo, y Paco y yo. Yo que estoy muy motivado pongo un ritmo muy fuerte que me hace llegar arriba ligeramente destacado. Ligera bajada y llegamos al cruce donde Paco y yo esperamos a los dos para encaminarnos por esta variante que se las trae.

El carril pierde su buen estado y bajamos mts. rapidísimo cruzando el Barranco de Navazorrita. Este tramo se las trae ya que empezamos a coger altura en demasia. Seguimos en dos parejas en el mismo orden pero esta zona Paco la lleva mucho mejor, cosa que yo sufro y solo al final de una pendiente de cojones hecho el resto para pasar primero, pero más adelante nos llega otro repecho inferior y ya no tengo fuerza, y debo conformarme viendo el pedalear de Paco. Unimos otra vez el grupo y charlamos de como nos ha ido y Mario y yo comentamos que si hubiesemos ido solos nos hubieramos bajado pero que por amor propio no lo hemos hecho.

Ya estamos cerca de retroceder nuestro paso por la pista forestal que nos ha de llevar al Barranco de Tejadilla. La bajada es rápida ya que parece que vamos por una autopista y la pendiente nos lanza. Al llegar abajo paramos un poco para ver lo que nos queda.

Como todo el día hacemos dos dúos pero esta vez Paco se queda atrás con Eduardo y Mario y yo tiramos hacia delante. La subida es serpenteante pero de buen firme lo que hace sacar desarrollo a la bici. Pasamos el Collado de Pichulín, donde Mario parece que el esfuerzo le fatiga y seguimos ascendiendo hasta el cortijo de las Carnicerías donde volvemos a ser cuatro. Debemos seguir ascendiendo pero el desnivel no tiene nada que ver con lo que llevamos a nuestra espalda.

De repente, al pasar el Cortijo de Corchito nos encontramos con una valla cerrada pero creemos que solo esta para que no pase vehiculos motorizados por que por el lateral se puede pasar un bici en peso sin problemas.

Llegamos a la carretera que nos da dirección a El Alamo y que nos lleva al punto más alto de esta etapa. Ligera bajada y abandonamos la carretera por el carril que es ancho. Son unos km. de toboganes con más bajadas que subidas. Tanto es así que por fin cogemos la gran bajada que nos lleva al puente del Río Cañaveroso. Ligero descanso para emprender la dura subida a Charcofrío.

Por fin nos decidimos. Hoy es el día de los duetos, pero esta vez volvemos a los del principio. La subida la llevo yo hasta que de repente Paco saca toda su raza y pone un ritmo que no soy capaz. La sorpresa me la encuentro arriba cuando no lo veo. Le doy dos voces y aparece. No se le ha tenido que hacer tan dura. Pasan los minutos y Mario y Eduardo no vienen. Vamos a buscarlos y están subiendo los dos andando. A Mario le ha dado un tirón en el cuadriceps.

Ahora ya lo que nos queda es bajar por el carril hasta que encontramos el desvio que nos lleva por el Arroyo de la Viscosa a las cercanías del Cortijo de Charcofrío donde recargamos agua en su fuente.

Este tramo hasta llegar a la carretera que nos lleve a Aznalcóllar es un tobogán continuo pero como el anterior del día con bajadas grandes y algún repecho fuerte. Al llegar a la carretera Paco y yo esperamos a los dos.

Ya solo nos queda subir al pueblo donde en una fuerte rampa en pendiente pongo todo el desarrollo y ataco lo que me hace llegar al pueblo en cabeza. Paco llega después y el dúo Calavera al rato. Nos dirigimos a los coches y nos tomamos unos refrescos y para casa.

Buen día.

domingo, 8 de marzo de 2009

Montequinto-Utrera

Esta mañana he quedado con Julián en la Pablo Olavide para dirigirnos hacia Utrera. Íbamos a ir los dos solos, pero anoche vi a Gonzalo y se lo comenté y dijo que se venía.

Nos encaminamos hacia Torrequinto para recogerlo. Gonzalo nos ha enseñado un camino que nunca había hecho desde su barrio hasta Alcalá. El camino es casi siempre en bajada con lo cual llegamos muy rápido a la ciudad.

A partir de aquí cogemos por el lado del Parque de la Oromana y allí nos desviamos para emprender camino hacia Utrera por el Camino de Cuesta Carretilla.

Desde Alcalá hasta la cima de la cuesta es en ligero ascenso. Ahora fuerte bajada con regueros de las últimas lluvias y a partir de ahora unos buenos km. de carril fangoso y muy botoso.

Los km. siguen y por fin en las cercanías de Utrera el camino deja de tener ese barro para ser de piedra con lo que el avance se incrementa. Por fin llegamos a Utrera donde desayunamos en un bar.

La vuelta como teníamos pensado la haremos por la vía de servicio de la A-376. Las piernas las empiezo a notar más cansadas pero el terreno hace que los mts. pasen rápidos.

Cuando llegamos a Torrequinto, Gonzalo nos invita a ir a su casa a limpiar las bicis. Lavado y nos despedimos. Bajamos por el carril de servicio de la autovía y ya estamos en Montequinto, donde me despido de Julián que él debe de seguir hasta su casa.