lunes, 27 de diciembre de 2010

Conclusiones

Bueno como el año pasado vamos a pasar revistas a las rutas hechas.

Normalmente he ido primero o en el grupo delantero, excepto la ruta del último día del año en la que quedé el último. La novedad de éste año tal vez halla sido el Desafío de Aznalcóllar donde quedé el 8º en la Ruta Corta. Las lesiones han sido sobretodo la alergia en la que he parado tres semanas y la fisura de costilla en la caída del Rally de Villaverde que me dejó KO durante poco más de un mes. Este año no he tenido ruta con alforjas posiblemente debido a la crisis.

Los datos del año son:

56 salidas solo o en compañía.

2688 km. con un desnivel positivo de 36229 mts. He hecho unos 100 km. más que en el 2009 pero con 11000 mts. más por lo que las rutas han sido más duras.

139 horas 32 minutos y 55 segundos que aunque parezca increíble han sido 8 minutos menos que el año pasado.

Un IBP de 2419 donde la más dura ha sido la ruta el Desafío de Aznalcóllar.

Este año uno de los recuerdos más bonitos fue la ruta veraniega en compañía de Julián, Paco, Mario y Eduardo.

Y mil gracias a mi mujer y mi niña que la mayoría de las veces no me ponen mala cara, excepto el día en que me caí.

Gracias a todos.

domingo, 26 de diciembre de 2010

Bormújos-Aznalcázar-Puebla del Río-Almensilla-Mairena

Posiblemente ésta halla sido mi última salida del año. Después de recoger a Julián nos hemos ido para el hospital donde habíamos quedado con Mario.

Mientras terminaba de prepararme han ido los dos a la gasolinera a meterle más presión a los slics. Salí en su busca y una vez listo nos fuimos para Aznalcázar por la carretera.

La velocidad ha sido rapidísima. En un santiamén hemos llegado al pueblo para comernos las tostadas. La media habrá rondado los 29 km/h, cosa que más tarde se hará pagar.

El frío ha sido menos de lo esperado, pero tras estar un rato parado por el desayuno teníamos ganas de volver a las bicis para entrar en calor. Saliuos del pueblo en busca de Puebla del Río.

Cogimos el desvio de la carretera y ésta empeoraba pero el tráfico era menor. El viento nos empezaba a azotar y tras 8 km. nos viene un recodo donde lo cogemos de frente y en eéste punto empieza mi calvario. Mi inactividad empieza a notarse junto con el ritmo que llevabamos. Se me escapa Mario y al poco tiempo me coge Julián que también me sobrepasa.

Los km. van pasando pero mis piernas no se recuperan. El pulsómetro lo llevo por las nuebes y apenas ando. Me van esperando cada cierto rato sobretodo Julián que se pega muchos km. a poca distancia mía.

Por fin llegamos a Puebla del Río y el viento ya no es tan fuerte, pero para mi desgracia estamos en el punto más bajo de la ruta y eso que no es que tenag grandes desniveles, pero cualquier rampa la subo con piñones altos y eso que llevo las ruedas lisas.

La salida de Puebla nos acerca a Coría que no la pisamos ya que cogemos la carretera que va hacia Almensilla. Durante unso minutos resurgo de las cenizas como Ave Fénix, pero eso, solo unos minutos ya que vuelvo de nuevo a llevar ese ritmo que no me hace avanzar. Mario cada vez me espera más rato en los cruces y Julián se escapa como quiere.

En Almensilla nos líamos un poco y callejeamos por el pueblo y en la salida un energúmeno que debería de estar retirado de detrás de un volante nos pitan como si el carril fuera para él solo. El problema es que fuerza no tengo para dar pedales pero para mandar a la mie...a todavía me queda algo.

Llegamos cerca de Palomares que no la pisamos en busca de Mairena. Al llegar a Mairena callejeamos un poco hasta coger la carretera que va a Bormujos. Por la zona del Zaudín que han puesto 3 carriles por sentido se nos pone una retrasada detrás a pitarnos. Al principio le digo que salte por lo alto pero como que seguía de nuevo la mande a hacer companía al abuelo. Menos mal que ya llegamos a Bormujos y poco a poco me acerco al coche donde me esperan estos dos.

Hacia casi dos años que no tenía una pájara como ésta pero viene bien de vez en cuando para ponernos los pies en el suelo.

domingo, 19 de diciembre de 2010

Aznalcóllar-El Castillo de las Guardas

Por fin tras 35 días he vuelto a montar sobre mi bicicleta. Aunque el tiempo amenazaba Julián y yo nos hemos arriesgado a ir a Aznalcóllar para ir en dirección a El Castillo de las Guardas.

Poco después de dar las 9 de la mañana hemos empezado nuestro pedaleo que ha sido siempre por carretera ya que el terreno no debe de estar muy bueno y era un reconocimiento para ver como me adaptaba a volver a montar tras mi fisura de costilla.

Tras cruzar el Puente de Zapata se acaba lo bueno y eso que solo llevabamos 3 km. Desde éste punto ya solo queda subir y volver a subir hacia El Castillo. También tiene alguna bajada, pero mínima.

Hasta el Alto de Tabernillas es un poquito exigente, o eso me ha parecido a mí. Son 6 km. de ascenso (160 mts.) con algún tramo en bajada (8 mts.) y con una rampa del 8%. Lo bueno de ésta ha sido el viento que hoy arreciaba fuerte pero por la arboleda estabamos muy protegidos.

El siguiente tramo ha sido posiblemente el más duro. 9 km. sin apenas cuestas duras pero que el viento nos entraba muy fuerte de noroeste. Esperé a Julián para ir juntos lo más posible y con paciencia llegamos cerca de la Colada de los Camellos que se llega tras atravesar éste tramo a escasos 800 mts. en bajada.

Ahora nos encaminamos a una subida sin ninguna bajada de 4 km. que nos ha de llevar al punto más alto de la ruta (439 mts. snm.) y con una rampa del 7,4%. Las fuerzas escasean pero sabemos que la tostada está cerca.

Solo 5,4 km nos falta para llegar al pueblo, de ellos 4,7 km. en bajada. Subimos esos 700 mts. con una rampa del 6,8% y llegamos a El Castillo de las Guardas, donde paramos a desayunar.

De vuelta a las bicis salimos del pueblo hablando tranquilamente y nos acercamos a la subida dura de la vuelta. De los 4,7 km. de subida, los realmente duros son los 1,5 km. finales al 6,1% de media. Lo subimos como podemos gracias a que también tenemos el viento a favor en algunos tramos.

Nos faltan 24 km. que se nos ha pasado volando ya que solamente cuando girabamos en dirección oeste nos apretaba el viento. La mayoría del tiempo nos daba por detrás con lo que la velocidad ha sido bastante alta y encima casi siempre bajando. No recuerdo bien el sitio, pero ha habido un tramo en subida que incluso lo he subido con plato grande y a 32 km/h gracias al viento.

Por fin llegamos al coche donde soltamos nuestras bicis y estiro un poco para volver para casa. La sensación ha sido bastante buena aún sabiendo que el nivel que tengo ahora mismo está bajo mínimos.