Tras un pequeño parón por molestias en la rodilla, he salido a probar y las sensaciones muy buena. La pomada que me han mandado va de fábula.
Estos días he aprovechado para quitarle el dichoso ruido a la bici de carretera y al final ha sido la tija la que daba el ruido. También he probado los pedales de carretera pero no voy del todo cómodo.
Al final he tenido que salir por la tarde ya que Merchi trabaja hasta el jueves y a las 6,30 con un poquito de calor he salido en dirección a la gasolinera para darle aire a las ruedas. He salido con tranquilidad hacia el hipódromo para llegar a Dos Hermanas y el viento creía que me iba a dar en contra yendo hacia Utrera pero al final ha sido de costado y un poco a favor con lo que me he encajado bastante rápido en Utrera.
Sin parar doy la vuelta en la rotonda y comienzo a notar el “enemigo invisible”. Intento tirar de coco y me relajo y que pasen los km. que algún día llegaré a casa. Había tramos, los menos, en lo que he tenido que poner incluso el plato pequeño.
Con la calor empiezo a beber cada tres km. para llegar con algo en los bidones y no dejarlos secos en mitad de la ruta. Ya subiendo hacia el hipódromo calculo y bebo con más tranquilidad.
Al llegar a casa un buen rato estirando y a la ducha.
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