Conclusiones

Bueno como el año pasado vamos a pasar revistas a las rutas hechas.

Normalmente he ido primero o en el grupo delantero, excepto la ruta del último día que para conseguirlo me deje el higado y algo más. Este año no he participado en ninguna carrera. Las lesiones ha sido de lo peor, ya que me han dejado cerca de tres mese sin coger la bici y sobretodo por que fueron por dos accidentes de tráfico en los que sufrí un latigazo cervical. La alergia apenas la he notado ya que el primer parón fue en esa época. Este año no he tenido ruta con alforjas posiblemente debido a la crisis. Me he comprado dos bicis este año, una de carretera que me viene muy bien para entrenar, y otra plegable que la utilizo para ir al trabajo en el metro y hacer algo más de ejercicio.

Los datos del año son:

56 salidas solo o en compañía.

3122 km. con un desnivel positivo de 38086 mts. He hecho unos 500 km. más que en el 2010 pero con 2000 mts. más por lo que las rutas de carretera me han servido para coger fondo. Con la plegable le puedo sumar 238 km. pero no se el desnivel que será poco.

142 horas 40 minutos y 52 segundos que aunque parezca increíble han sido 8 minutos menos que el año pasado.

Un IBP de 2530 donde la más dura ha sido:

• en carretera la Guillena – Castilblanco de los Arroyos – El Ronquillo – Guillena 105 IBP
• y en montaña la Coripe – Mogote 100 IBP

Este año uno de los recuerdos más bonitos fue la última ruta del año donde nos juntamos Eduardo (que solo he salido una vez este año), su compadre, Alex, José, Paco Mario y Julián. Estos dos últimos si los he visto más.

Y mil gracias a mi mujer y mi niña que la mayoría de las veces no me ponen mala cara.

Gracias a todos.

Que duras son las vueltas

Mira que hacia frío, mira que no quería coger la de montaña, pero cuando el día de Nochebuena me mando un sms Eduardo para salir hoy ni me lo pensé. No salía en bici desde el día antes del accidente con el coche, pero las ganas de verlos me animo como a un niño chico con sus zapatos nuevos.

A las 8,20 recogí a Julián y nos fuimos para el Alamillo donde habíamos quedado a eso de las 9 pero con tan poco tráfico llegamos pasadas las 8,30. No quedamos en el coche hasta menos 10 y ya empezamos a desmontar las bicis. El primero en llegar fue Mario y al rato llegaron Eduardo, José “el compadre”, Alex, José el sobrino de Eduardo, y un poco más tarde Paco. 8 ciclistas dispuestos a celebrar un día dando pedales tras tanto tiempo sin vernos.

Salimos de Sevilla por el Estadio Olímpico en dirección a Santiponce. El grupo a los grupos mejor dicho íbamos charlando de nuestras andanzas durante este tiempo. Al llegar al pueblo cogimos la Vía Verde de Itálica que no la soltamos hasta llegar a la Cañada Real de la Isla Mayor. Llegamos Paco y yo y los esperamos un poco. Me llevaba con la lengua fuera, bueno mejor dicho me llevo todo el día con la lengua fuera. Tanta calor estaba pasando que me quedé el último por que me quite la braga que llevaba en el cuello. Tranquilamente les fui dando caza sobretodo al empinarse la cuesta llegando a Salteras donde poco a poco adelante a compañeros.

Al llegar al pueblo lo cruzamos por su calle principal y por alguna más interior pero no encontramos bar donde pudiéramos desayunar. La solución llegar a Olivares donde conocemos más bares. La carretera que une estos dos municipios está muy estrecha pero desde este verano que abrieron un carril bici es muy segura. De nuevo Paco tirando y yo siguiéndole como podía.

Al llegar a Olivares reagrupamiento y en busca de algún bar que nos costo ya que estaban cerrado los que tenían veladores. Por fin encontramos uno y que buena sus tostadas. De nuevo mucho hablar y comer pero tocaba regresar a pedalear. Lo peor es que de repente se levantó un airazo en contra o de costado casi frontal que nos o mejor dicho me reventón.

Cogimos camino a la depuradora de Aljarafesa que en esta dirección se nota que se va subiendo siempre y como pude seguí a Paco. Bajada rápida y parada a unir al grupo. Allí abajo Paco decidió el camino a seguir y estábamos todos con la mosca detrás de la oreja por que se le conoce. Fuimos aproximadamente un km. en dirección a Gerena hasta que nos salió un cruce a la derecha que nos llevo cuesta abajo a coger el Camino del antiguo ferrocarril de las minas de Aznalcóllar. Ahí empezó lo realmente malo. El viento muy frontal por tramos y haciendo honor al nombre del camino había piedras de vía de tren  que nos hacían temblar sobre nuestras monturas.

Por fin llegamos de nuevo al cruce de la vía verde con la Cañada Real donde se unió el grupo y nos hicimos unas fotos.

Ya parecía que todo se había acabado pero aunque el terreno no tuviera exigencias, el ritmo de Paco si. El amor propio me puede y por no dar e brazo a torcer me retorcía sobre el manillar. Al llegar a Santiponce solo esperaba pasar el tramo de subida al Estadio Olímpico y después el zigzag del Alamillo. El primero lo pasé canutas para seguir al archifuerte de Paco y en el zigzag lo deje todo y pude aunque solo fuera en ese momento superarlo. El coche nos espera a pocos mts. y la despedida de los compañeros también.

A estas horas de la noche solo se que: ¡que duras son las vueltas! 

 

Aznalcóllar

Tras el cambio horario he quedado con Pedro, Jesús y su hermano Rafa en Aznalcóllar a las 8,30 de la mañana con lo que no hacia ni frío. La idea hacer la ruta de la Diputación para que Pedro conozca esta zona.

Salimos en bajada por la carretera hasta el Embalse donde ya empiezan los repechos y veo que Rafa le pega a esto. Pedro se va quedando pero los esperamos en los cruces. Al llegar a la casa de la Sebastiana poneos punto final a la carretera y tras el reagrupamiento cogemos el carril. Bajamos hasta el Arroyo de la Sebastiana donde da comienzo el Puerto de la Cruz que ronda los 900 mts. al 6,6%. Una vez pasado el puerto se sigue ascendiendo por toboganes y Rafa me coge y vamos los dos juntos hasta el cruce de camino para que estos no se pierdan.

Una vez que estamos los 4 bajamos hasta el Barranco de Tejadilla donde comienza otra subida dura. Tras 1,1 km. al 6,6% esperamos a Pedro a que se una a los tres. Juntos avanzamos por el camino que sigue en subida pero a un km. me viene un pinchazo de la rueda trasera. Paramos a arreglarlo cambiando de cámara y cuando la monto e inflo Rafa y yo notamos que sigue perdiendo aire. Jesús y Rafa que tiene prisa siguen su camino y me dejan una cámara nueva y Pedro y yo nos quedamos arreglando de nuevo el pinchazo. Le pongo un parche a la pinchada y pongo la nueva.

Continuamos la marcha 30 minutos más tarde y subo todo el rato al ritmo de Pedro. Al llegar a la carretera le comento que la ruta continúa por la derecha pero que si no está bien por la izquierda es más rápido. Decide por la izquierda y nos lanzamos cuesta abajo pero en un repecho nos pasan cuatro ciclistas. Más adelante continúa la bajada y me lanzo pero Pedro se queda un poco atrás y cojo a dos. Sigo mi persecución y llego al segundo que le comento que se una para pillar al primero pero no puede. Al rato lo pillo y nos damos unos buenos relevos rápidos hasta llegar a la zona de Posterillo donde los dejo y espero a Pedro que tarda un rato.

Como no venía me voy en su busca y lo veo en un grupo y a llegar me comenta que le ha picado una avispa en el gemelo. Continuamos la marcha y nos alejamos de su grupo y al llegar a Aznalcóllar que es en subida se nos une uno de su grupeta que a pocos mts. de llegar nos ataca. El ciclismo dominguero es esto, gracias a Dios. Al llegar a los coches montamos las bicis y nos tomamos unas cocacolas.

Le comento que es mi última ruta ya que ahora quiero dejar un tiempo la bici para estar con la familia y sin el barro.

EDITO: El lunes siguiente me han dado por detrás en el coche y no se cuanto tiempo estaré de baja. Al final es verdad que no voy a coger la bici.

Sevilla – Carmona

Tras lo incompetente que son los del tiempo, ha habido mil cambio de ruta para este sábado, y al final he salido con Paco y Alfonso con las flacas.

A las 8,30 estábamos ya en Sevilla Este. Vamos en dirección  a la rotonda de la carretera Brenes pero cogemos la N-IV en dirección Córdoba. La mañana está fresca y a la altura del aeropuerto nos pasa un avión aterrizando a no más de 20 mts. de altura ¡increíble! La ida no tiene ninguna dificultad excepto el viento que es un poco en contra y que vamos siempre ascendiendo hasta llegar a Carmona que vamos pasando sus salidas hasta que nos viene una bajada que nos deja en el lado sur de los Alcores.

Justo abajo comienza la subida y tras 1,3 km. sale a la derecha una carretera que va hacia la Puerta de Córdoba de Carmona. Es un kilómetro al 7,8% donde me quedo solo ya que Alfonso no coge esta carretera y Paco en la primera rampa dura se para hasta que venga yo de regreso. Como no la conozco bien paso la Puerta y sigo ascendiendo durante 200 mts. mas al 12% adoquinado que me deja listo de papeles. Lo peor ha sido dar media vuelta y bajar con el tembleque. Llego a la altura de Paco y llegamos de nuevo al cruce donde todavía queda por subir 1,6 km. al 4,5% que parece poco pero tras lo anterior voy justito.

Al llegar a donde nos espera Alfonso callejeamos y desayunamos en un bar. Reemprendemos la marcha y salimos de Carmona en busca de nuevo de la autovía.

La diferencia entre la ida la vuelta es brutal ya que tardamos menos de media hora entre una y otra. Lo peor el tráfico que a estas hora es mayor y no apetece ir por estos sitios.

Al llegar a Sevilla montamos las bicis en el coche de Paco y para casa

Sanlúcar La Mayor – Minas Aznalcóllar

Día laborable para la gran mayoría pero como yo estoy en uno de mis descansos aprovecho para irme a Sanlúcar La Mayor a hacer una ruta nueva solamente en el tramo de bordear Aznalcóllar.

Tras el largo viaje de coches llego al punto de salida y la verdad esperaba más frío. lo malo es que la ruta comienza cuesta abajo y la sensación térmica es peor, pero al comenzar a bajar me llevo un primer susto por un gran banco de arena que me hace frenar bastante. La arena era blanca y muy fina como si fuese cemento. Sigo muy lentamente hasta llegar al corredor y me fijo y veo la bici blanca pero si me miro a mi mismo parezco un fantasma.

Ya en el corredor el movimiento sobre la bici es más rápido y poco a poco voy entrando en calor. La dificultad es que me entra un poco ve viento de cara pero tan poco que en un santiamén llego al final del corredor.

Sigo de frente y cojo un buen carril que me lía ya que no me doy cuenta que el GPS me manda hacia una veredita a la izquierda. Retrocedo mis pasos y me adentro en ella. El terreno ya no es tan bueno y comienzo a coger desnivel levemente. Tras cruzar el río de los Frailes el terreno pica más fuertemente pero peor que el terreno son las vistas. Y no es que la serranía esté fea, todo lo contario, sino que veo una manada de toros pastando al lado de mi carril y en medio de él. Hago de tripas corazón y poco a poco me acerco a ver si se van pero lo peor es que escondido en el otro lado tras un árbol hay dos más. Ya no tiene remedio, o paso por ahí o salgo en todos los periódicos. La sangre no llega al río y puedo continuar.

Los tramos más ascendentes siguen y en aumento ya que afronto uno al 7,3% de 470 mts. por un carril descarnado que me hace resollar. Por fin paso un paso canadiense donde se que mis amigos los “bravitos” no me seguirán. El carril pasa a ser muy ancho al estilo de la zona y tramo de subidas y llanos me llevan hasta el cerro de la Cruz Gorda, 500 mts. al 8%.

Tras llegar al punto más alto de la ruta me implica por lo menos bajar algo sobretodo tras pasar la Casa del Guarda donde bajo durante 3,5 km. hasta llegar al Puente de zapata que ésta vez no lo cruzo ya que cojo un camino que me lleva a pasar un puente sobre el contraembalse del Agrio. Lo malo es que estoy muy bajo y debo de ascender. Subo por buen firme adoquinado o parecido hasta el mismo pueblo donde busco el bar de costumbre para desayunar.

Tras el refrigerio voy por la carretera de Gerena hasta el corredor donde desando mis pedaladas. El viento ha cambiado y viene de levante fuerte por lo que me está dando por la izquierda y en algún giro me favorece y entro me penaliza.

Llego al inicio de la subida y para tan solo ser 2,1 km. al 5,6% tardo 13 minutos ya que la rueda se va hundiendo y debo de hacer malabares. Por fin llego al coche y me sacudo para quitarme todo el polvo y regreso para casa.

Santiponce – Embalse de la Minilla (El Ronquillo)

Esta mañana al final he tenido que salir solo, así que preparé la de carretera y a eso de las 8,30 ya estaba saliendo de Santiponce con la idea de llegar a El Ronquillo.

Los primeros 7 km. son cuasi llanos, pero a partir de ahí el llano casi desaparece. Los siguientes 10 km. me llevan a Las Pajanosas y aunque en su mayoría se sube a plato las piernas si dejan de pedalear te caes para el lado. Ya saliendo de Las Pajanosas abandono el plato grande y voy subiendo rampas de más pendientes y más largas. Poco a poco me voy acercando a la Venta del Alto donde me acerco a una de las bajadas largas del día. Me relajo en ese tiempo sin pedalear pero aún así la media es de 46 km/h.

Por delante la cuesta de las Baterías. Es la primera de las duras y cortas ya que lo anterior ha sido de constante dureza con tramos donde se puede un relajar. Esos 1,8 km. al 6,4% los pasos como puedo y tras llegar a una gran rotonda el camino se relaja un poco ya que los siguientes 4,6 km. son al 2,8% con tramos al 8% pero más cortos.

Al llegar a El Ronquillo me planteo bajar al embalse de la Minilla y me lanzo cuesta abajo hasta llegar al embalse donde acaba el asfalto y retrocedo lo bajado, ahora subiendo. Son 3,8 km. al 4,6% donde lo mas duro es al principio donde hay alguna rampa de las duras. El resto se sobrelleva como puedo ya que sigo acumulando desnivel pero con la confianza de que solo me queda subir la Media Fanega la mente hace que las piernas se esfuercen para culminar la etapa.

Tras llegar al pueblo empiezo a bajar hacia el inicio de la última cuesta del día, pero antes consigo llegar en la cuesta abajo a los 68 km/h. Desde el ordenador me parece una locura pero si vas seguro sobre la bici no tanto.

Decido subir la Media Fanega por la parte vieja que aunque el firme es espantoso me gusta más ya que tiene muchas más curvas y mentalmente me es más fácil. Son 4,1 km. al 5,1% en los que voy trazando de lado a lado del carril buscando la zona donde mejor agarre la rueda.

Ya en la Venta del Alto mi mente empieza a pensar que ya he acabado pero más tarde sabré que no queda tan poco. A lo lejos veo a un ciclista que poco a poco lo voy cogiendo hasta llegar a su punto. Lo sobrepaso pero en una bajada se me engancha y empezamos a hablar. Viene de Gelves a sus 70 años, ¡qué envidia! Vamos juntos hasta Las Pajanosas donde se para y yo sigo.

Yo sabia que ahora me venía un tramo más llano pero jamás pensé que se me hiciera más duro que alguna de las subidas realizadas. Estos 12 km. finales me he arrastrado por la carretera y en cuanto me venía un ligero repecho, incluso ponía el plato pequeño. Por fin veo la salida de Santiponce que la cojo con mucha alegría y más al ver el coche.

Que cansado que estoy.

Montequinto - Utrera

Tras estar muy cansado he decidio cambiar de ruta. Después de dejar a Lucía en el cole he salido hacia Utrera. Como siempre para llegar a Dos Hermanas cojo por el hipódromo y noto como el viento me viene de cara. Ya se que las condiciones del viento son casi al 90% igual que bajando hacia la ciudad, con lo que el tramo más desprotegido por la vía de servicio no va a ser fácil.

Salgo de la ciudad y empiezo a notar más y más el viento pero en cambio noto como los km. pasan rápidos. Al llegar a la vía de servicio veo ciclistas que van por delante y los voy cogiendo poco a poco. Al llegar a Utrera veo que la media me ha salido de 26,8 km/h que para llevar el viento en contra está muy bien. Mis dudas es si me he equivocado y el viento no era tan en contra. La solución tras dar un giro de 180º a la rotonda y por fin he acertado.

La vuelta es mucho más liviana y casi sin darme cuenta llego de nuevo a Dos Hermanas. Tan solo me queda subir al hipódromo para llegar a Montequinto. La subida con el viento a favor es muy agradecida y rápidamente llego arriba donde me relajo los últimos km. antes de llegar a casa. El total ha salido a 28,7 km/h. Espero poder salir el próximo día con alguien que es más divertido.

Guillenazo

Tras no haber podido salir la semana pasada por problemas familiares, ésta íbamos a salir solamente Mario y yo, así que quedamos en Guillena sin tener muy claro que ruta haríamos.

A las 8,20 comenzamos estando la mañana muy fresca. Menos mal que el inicio es ascendente mayormente y poco a poco entramos en calor. La subida por la parte sur de La Lenteja es larga pero muy llevadera. En todo momento fuimos juntos y tan solo en alguna rampa más dura aflojaba el ritmo para seguir juntos. Tras coronar nos lanzamos cuesta abajo y realmente lo llevo fatal las bajadas. Se me hizo eterna, pero por fin abajo decidimos continuar hacia delante y no desayunar en la Cantina.

Bajamos hacia la presa de Guillena y no ponemos a encarar la cuesta de los Toros. Al igual que la anterior subida la idea es en todo momento juntos o como mucho unos 20 mts. por detrás Mario. Arriba espero no más de 5 segundos y continuamos hasta el cruce de caminos donde nos comemos unas barritas y decidimos hacer el Guillenazo.

El trayecto hasta el embalse de Castilblanco es al principio ascendente pero cuando empieza a bajar de nuevo lo paso mal y con motivos ya que el carril esta con muchísima piedra suelta y por momento era ingobernable la bici. Sin pausa empezamos la subida a Castilblanco que es un poco traicionera ya que el inicio es lo más duro pero cuando empiezas a ver el pueblo tienes la sensación de que ya se ha acabado todo y queda cruzar el pueblo de oeste a este, es decir, pasar un montículo bastante exigente por las rampas no por su distancia.

Al llegar al pueblo subimos sus rampas y vamos hacia la salida donde desayunamos unas buenas tostadas. Salimos del pueblo por carretera que no abandonamos hasta llegar al Camino de Santiago que lo cogemos en dirección a Guillena. Ahora empieza otra de las cosas que se me dan fatal, las trialeras. Voy en todo rato en cabeza pero en un momento no cojo el lado bueno y Mario me pasa y las paso canutas para cogerlo cuando se acaba las trialeras ya que circulando por ellas se me va cada vez más.

Al salir de estas y los dos juntos vamos bajando hasta el polígono industrial pero la bajada está muy rota por las lluvias de este invierno y como cojas mal la trazada debes para casi por completo. Ya en el polígono buscamos la carretera que lleva al pueblo y al momento llegamos a los coches.

Ahora me viene dos fines de semana sin poder salir así que me tocará solo entre semana.

Montequinto – Alcalá – Dos Hermanas – La Corchuela - Montequinto

La ruta de hoy era con la idea de hacer una rutilla llana por la zona sur de Sevilla ya que Mario esta un poco harto de la ruta del agua y toda esa zona. Quedo con Mario y Julián en mi casa y a eso de las 7,45 arrancamos.

Vamos en busca de la vía que une la Pablo de Olavide con Alcalá pero no nos metemos en la universidad ya que esta de obra el puente que cruza el Canal del Bajo Guadalquivir. Cogemos por al lado de la Urbanización del club de golf y llegamos a cruzar el Guadaira donde ya circulamos por la vía.

El terreno esta deteriorado de las lluvias de la semana pasada y en un regajo clavo la rueda delantera y menos mal que saco el pie a tiempo. Continuamos y llegamos a Alcalá que tiene una buena rampa de 160 mts. al 10,4% que nos deja en la cima cogiendo mucho aire. Continuamos y nos metemos por el parque de la Oromana donde nos metemos dos repechos, uno de 80 mts. al 12,7% y el otro de 160 mts. al 6,7% que es más llevadero. Salimos del parque y vamos en busca del Castillo de Marchenilla que lo vemos a unos 100 mts. cuando cogemos una cuesta abajo paralela a la carretera de Morón que nos deja en uno de los últimos escollos del día, una rampa de 60 mts. al 10,6% que nos deja a los pies de la Vereda de Benagila.

El viento nos acompaña por esta zona donde no tenemos ninguna protección ya que los cultivos los han arrancado hace poco. El firme es bastante botoso sobre todo al girar a la derecha y coger el Camino de Benagila que nos deja en una carretera donde esperamos a Julián.

Una vez que volvemos a ser tres continuamos girando varias veces de dirección por en medio de las urbanizaciones y al llegar a la Colada de Pelay-Correa la arena cobra importancia. Varios bancos nos hacen enlentecer el ritmo y hacer de funambulista sobre las bicis. Llegamos por fin a Dos Hermanas donde desayunamos en un bar de gran recuerdo para Julián.

Estamos justo en el ecuador de la etapa pero con la barriga llena. Cruzamos Dos Hermanas hacia el barrio de Las Portadas donde cogemos la Colada de los Palacios. Allí vemos 4 parapentistas a motor que nos entretiene un rato la mirada. El ritmo va en aumento y de nuevo dejamos atrás a Julián y al llegar al cruce con la Colada de los Plateros lo espero un poco para ver que viene. Ya por ésta colada el ritmo aumenta más todavía ya que el terreno es mayormente descendente. Al llegar al Canal del Bajo Guadalquivir esperamos a Julián y a su llegada cogemos por el lado este de Canal en dirección norte.

Son las 11 de la mañana pero esta siendo muy agradable el tiempo con lo que de nuevo nos exprimimos un poco Mario y yo y Julián solo lo vemos por el retrovisor (imaginariamente). El terreno es muy bueno pero hay que tener cuidado ya que el canal no tiene protecciones y algunas ramas acortan el carril. Llegamos a la carretera de Isla Menor y tras cruzarla seguimos un poco el canal hasta desviarnos en busca de La Motilla. El terreno vuelve a subir pero muy ligeramente. Arriba pasa el carril a asfalto y nos lanzamos hasta llegar a la ciudad donde le comento a Julián por donde deberá tirar ya que el ha salido desde su casa.

Subimos hacia el hipódromo y el viento aunque suave era a favor y era la primera vez que he subido esa cuesta con plato grande sin cruzar la cadena. Arriba espero un poco a Mario y a Julián una pizca más. Nos despedimos de él ya que va en busca de la Olavide y nosotros para casa.

Bajamos hacia Montequinto donde Mario tiene el coche y yo mi hogar.

Burguillos – El Pedroso

Ultima salida antes de volver mañana al trabajo. Como estoy solo decido coger la de carretera y salir desde Burguillos para hacer un buen rutón como colofón final.

A las 7:40 comienzo a pedalear por la A-8002 y aunque no hay una buena visibilidad voy tranquilo subiendo que en poco tiempo sale el sol. El camino hasta Castilblanco es subiendo casi siempre. Son 11 km. que me hacen coger calor en piernas pronto sobretodo al pasar el Arroyo de Barranco Hondo donde me esperan 2,5 km. al 4,5% con rampas del 8%. Donde se une con el camino de Santiago mejora la pendiente aunque sigue subiendo y llego a Castilblanco donde espero desayunar, pero a mi paso solo veo bares cerrados. Por fin uno abierto que no tiene tostadas, pero en frente hay uno que si.

Tras el desayuno no me demoro y vuelvo a la bici y saliendo del pueblo en busca de la carretera A-3102 en dirección a El Pedroso. La carretera empeora en su firme pero al menos son 3,5 km. donde relajo las piernas en la bajada hasta el puente que cruza el Arroyo de los siete arroyos. Ahora me viene el Puerto de los Melonares por su cara fácil que es una pequeña subida de 1,6 km. al 3,5% que me lleva al descenso del auténtico puerto. Me lanzo hasta cruzar el río Viar donde me vuelve a comenzar las subidas.

No son muy duras pero la carretera está por tramos muy deteriorada. Tras 5,4 km. llego al cruce con la carretera A-432 que la cojo en dirección a El Pedroso. Para comenzar me viene un tramo de 2,1 km. al 6,9% que no me cansa por las piernas sino por la velocidad, ya que el arcén es muy justo y acelero hasta llegar a la zona donde se triplica la carretera. En la zona de 3 carriles me relajo un poco para cuando se termina volver a dar fuerte. La cuesta continúa con otro tramo de 2,6 km. al 3,3% para al llegar a la cumbre darme un respiro de 2,2 km. donde toboganeo hasta que cojo una fuerte bajada que me lleva a cruzar el Arroyo del Parroso (arroyo que llega al pueblo de mis padres).

Tan solo 6,3 km. para llegar a El Pedroso por una zona de toboganes donde asciendo 109 mts. con alguna rampa de poca consideración con lo que llevo de día. Al llegar al pueblo descanso un poco y me lanzo a desandar todo lo recorrido hoy.

De nuevo recorro esos 6,3 km. para llegar a subir un tramo de 1,6 km. al 4,4% con algún tramo al 7% que se me atraganta un poco. Tras los 2,2 km. de toboganeo me viene el tramo de bajada donde lanzo la bici a 64 km/h de máxima.

Dejo la carretera buena y vuelvo a la más pestosa que me ha de levar a subir los Melonares. Voy tranquilo aclimatándome para la subida hasta que llega. El Puerto de los Melonares son 4,8 km. al 5,9 % pero los 4 km. primeros son al 6,4% ya que el final tiene hasta un pequeña bajada. La subida la he llevado por tramos, muy bien al principio, me ha costado en medio y el final me he vuelto a recuperar.

Desde la cima a Castilblanco quitando la bajada del Puerto que sa bastante corta es un tramo de toboganes subiendo mayormente. Cruzo el pueblo en subida y hay un tramo de pavés que el que lo invento nunca cogió un bici. Ya solo me resta bajar a Burguillos y la bajada tiene tramos donde alcanzo los 68 km/h de máxima. En un pispas llego a Burguillos y al llegar al coche estiro bastante ya que la ida han sido 2:25 pero la vuelta han sido 41 minutos menos ya que el terreno era muy favorable.  

Montequinto – Olivares

De nuevo me toca salir solo. Unos por que no pueden salir, otros recuperandose todavía de la ruta del finde pasado, otros para ver la F1, cosa que me a dado tiempo de ver incluso ir a la piscina. Mucho gallinacea veo por aquí.

Casi a las 8 de la mañana salgo de casa en busca del carril bici de la Pablo de Olavide. El tiempo es fresquete pero todos sabemos que por desgracia no suele durar mucho. Llego a Sevila y voy callejeando hasta el Parque de Mª Luisa y a su salida cojo de nuevo el carril bici que me lleva a la Torre del Oro. Bajo hacia el río y a la altura de la pasarela de madera me doy un susto. Veo a un tipejo salir por arriba y da como un sílbido. Me da mala espina y al pasar el puente viene una ligerísima subida y veo al fianl de ella a otro tipo levantarse del banco y ponerse en medio del carril. Freno y me doy media vuelta y subo hacia el Paseo de Colón. Creo que las intenciones eran quitarme algo.

Una vez en Pza. de Armas cojo de nuevo el carril bici que me lleva al Charco de la Pava y de allí a Camas. Subo por la carretera que va hacia Olivares pero a 1,2km. sale el inicio de la Ruta del Agua. Empieza por una zona de toboganes que me dedico a adelantar a corredores haciendo footing. Al cruzar la carretera que une Santiponce con Valencia veo a un ciclista que me sirve de motivación para seguirlo. Lo peor que pude hacer. Hasta la depuradora de Olivares son 8 km. en los que me meto un tute para engancharlo y después no poder dejarlo atras.

Calentito descanso un poco a los pies de la subida y charlo con dos chavales de Dos Hermanas que han salido desde el manchón. Los convenzo para que venga conmigo por mi camino y eso hacen. Subimos hasta Olivares, 1 km al 7,2%, y uno se queda por detrás y otro por delante. Arriba que me espera el chaval le digo que nos dejemos caer hasta el pueblo mientras llega el colega. Cuando me doy cuenta retrocedo mis pasos por que no vienen. por fin aparecen y continuamos. Cogemos el carril bici hasta Salteras y los tres vamos apretando de lo lindo, Justo al llegar al pueblo cogemos la carretera y subimos el repecho que es el pueblo en si.

A la salida del pueblo siguen ellos hacia Camas y yo bajo en busca de la Via Verde de Itálica. Justo antes de llegar al cruce con la Ruta del Agua dos ciclista me paran para que les informe ha donde van los caminos y les hago una foto. Ttras un poco de charla y de explicación me lanzo cuesta abajo.

Ya en la vía me encuentro a otros ciclistas perdidos a los que asesoro y continúo que parezco un cicerone. Llego a Santiponce y ccallejeo para llegar al camino que va al campo de tiro y de allí al estadio olímpico. Ya en Sevilla cojo el carril bici y no lo suelto nada más que al allegar al parque para acortar y llegar de nuevo al carril bici que me deja en la Pablo de Olavide. Ultimos km. antes de llegar a casa y tranquilamente llego para estirar durante un buen rato.

Montequinto – Aznalcázar – Olivares – Camas – Montequinto

Al final he tenido que salir solo y he decidido salir de cas y con la de carretera. Poco antes de las 8 de la mañana salí en dirección a la gasolinera para inflar las ruedas. Una vez listo para la carretera que va a la Pablo de Olavide , pero que la cojo en dirección a los cuarteles.

Hasta el cuartel está más o menos decente pero de ahí a Bellavista de pena. Ya en Bellavista cojo el carril bici que me hace cruzar Sevilla menos el tramo de debajo de la Torre del Oro que no es para bici de carretera y cojo la avenida. Bordeo Pza. de Armas y dirección al Charco de la Pava que me ha de llevar a Camas.

Una vez en Camas busco la A-472 que me lleva a la Cuesta del Caracol, 3 km. al 3,4% pero por la zona del Carambolo tiene un rampa del 10% que aunque es corta fatiga. Una vez arriba he cruzado Castilleja de la Cuesta. Cambio de planes y cojo la A-474 hacia Bormujos que he de cruzarlo de nordeste a suroeste. Al salir del pueblo veo a un ciclista que me sirve de referencia. Cerca de la obra de la SE-40 lo paso y continúo hacia Bollullos de la Mitación.

Varios semáforos he tenido que cruzar pero sigo por la misma carretera. La zona tiene varios toboganes que no tiene ninguna dificultad. Los km. siguen pasando y llego a Aznalcázar que tan solo la toco por un costado ya que cambio a la carretera A-473 que me manda en busca de Benacazón.

Esta carretera es la que peor he llevado ya que el viento es donde me daba un poco más de cara, tenía un pinchazo en la cadera y mi mente me h¡estaba diciendo bajate de la bici. La idea original había cambiado y los planes nuevos era llegar a Olivares pero no lo tenía muy claro. Por fin llego a Benacazón que se cruza muy rápidamente y me falta un pequeño trecho hasta Sanlúcar La Mayor. Al llegar al cruce con la A-472 paro y busco la diferencia entre volver hacia Castilleja o llegar a Olivares. Tan solo tres km. más por lo que al final dejo a un lado Sanlúcar para ir por la carretera A-8077 hacia Olivares.

El camino sigue siendo ascendente pero toda subida llega a su fin y por en Olivares comienzo a bajar un poco. El pueblo lo paso rápido y cojo la carretera pero por poco tiempo ya que veo que el carril bici que llega a Salteras está casi terminado y me meto por él para evitar el tráfico y el poco arcén que hay. Tan solo una vez he tenido que saltar unos bidones de plástico y salirme un instante del carril bici por que estaba recién pintado y me di cuenta al ver la rueda roja.

Llego a Salteras y tengo que subir un poco para seguir bajando hacia su salida. Estoy en una zona de toboganes mas fuertes, ya que las bajadas son rápidas y las subidas me cuesta con el plato grande. Paso por las afueras de Valencina y de Castilleja de Guzmán y comienza la bajada fuerte del día, 2,4 km. al 5,2% donde lanzo la bici a 64 Km/h. Abajo llego a Camas y cambio de nuevo de planes.

La nueva idea es llegar a San Juan para cruzar por el puente de hierro. En un santiamén llego ya que las distancias son cortas. Llego a Sevilla y empiezo a desandar mis pasos una vez que lego a la Palmera. La cadera me sigue molestando pero este tramo de carril bici me hace ir más lento y lo agradezco. Al llegar a Bellavista voy en busca de los cuarteles y para casa.

Al llegar estiro mucho y ya apunto de recoger la bici veo que la rueda de atrás está pinchada. Imagino que ha sido al dar un bordillazo al intentar levantarla, cosa que no lo hice muy bien, pero al menos el cambio ha sido en casa. Es mi primer pinchazo y no vea como cuesta cambiar una cámara a estas ruedas.

Montequinto – Coria – Santiponce – Montequinto

Esta mañana he salido desde casa en dirección al campo del Betis donde he quedado con Mario. He cruzado a Condequinto para ir por la universidad pero a la altura del canal he tenido que variar la ruta ya que esta de obra el puente que lo cruza. Cojo un carril casi paralelo a la autovía de Utrera y me lleva hasta la entrada de la universidad. Me dirijo al carril bici que me lleva a Sevilla. La peor parte es cruzar alrededor de las 3000 viviendas pero a esas horas no hay nadie. Al ver a Mario nos encaminamos hacia nuestra ruta.

El ha salido desde su casa y lleva casi 500 mts. más que yo. Vamos en busca del Puente del 5º centenario y lo cruzamos por abajo.  El camino esta con muchos arbustos que dificultad poder ir en paralelo, e incluso en fila india. Vamos haciendo km. y bordeamos la zona de oficinas pegadas a la SE-30 y al llegar al puente del tren tenemos que cruzar por arriba ya que el que pasaba por abajo esta dentro de la propiedad.

Ya vamos circulando al lado del Canal del Nuevo Cauce del Río Guadaira y vamos charlando tranquilamente hasta que pasado el Copero empieza la obra de la SE-40 y nos despistamos seguimos rectos. El despiste nos cuesta entre la ida y la vuelta 3 km.

Giramos a la izquierda donde debíamos haber girado a la derecha y cogemos un carretera que al poco tiempo se corta de nuevo por la obra. Vamos intentado seguir el camino hasta que por fin llegamos a nuestro camino y sin más problemas seguimos pedaleando hasta Coria. Este tramo hasta la barcaza está con muchos socavones y piedras sueltas pero con cuidado no pasa nada. Al llegar esperamos un rato hasta que la barca llegue a nuestra orilla.

Cruzamos y vamos buscando un bar donde desayunar. Vamos pegados al río hasta que cogemos un carril que nos mete en una plantación de cardos de 2 mts. o más y se nos corta el camino. retrocedeos y encontramos un bueno que nos saca de allí. Casi a la salida del pueblo encontramos un bar magnífico con veladores en la puerta y un buen pan y precio.

Tras el desayuno continuamos para meternos en la Vereda de Aznalcázar. Giramos a la derecha para coger la Cañada real de Medellín a Isla Mayor y si tan solo hubiéramos salido 30 segundos antes nos habríamos evitado seguir a un tractor que iba echando agua al camino y nos estaba empezando a embarrar. Intentamos acercarnos para que nos dejara pasar pero no nos veía, y decidimos seguirlo a distancia. ya cerca de la carretera que una Coria con Almensilla el tractos debe girar a la derecha ya que el paso es muy estrecho, momento que aprovechamos para seguir sin el barrizal. De repente nos tenemos que para por que viene un camión y no cabemos todos. El “joio” viene a todo trapo y levantando una polvareda que con el agüita que llevamos salimos rebozados. Por fin pasa y llegamos a la carretera que la cruzamos para seguir por la misma Cañada y vemos como el tractor casi se pone delante nuestro. ¡Lo que hubiera faltado!

El camino mejora ya que es más ancho y con menos tierra suelta hasta llegar a la carretera cerca de Palomares. A partir de aquí se va encogiendo el camino y las ruedas de los tractores de este invierno tras las lluvias han dejado unas roderas que debes elegir bien cual coger. El camino continúa pero ahora por la Cañada Real de Isla Mayor. De buen firme los km. van pasando rápidos. Cruzamos la carretera de Bormujos-Bollullos, pasamos por debajo de la A-49 y llegamos a la carretera que une Espartinas con Gines. En ésta giramos a la derecha y pasamos a la parte izquierda para ir por el carril bici hasta arriba de la cuesta que nos deja cerca de Gines. Ahí debemos de coger el arcén derecho. Al llegar abajo giramos para ir en busca de Valencina pero antes debemos subir un repecho en Gines.

Desde la salida de Gines hasta la salida de Valencina todo es en subida. Vamos por el carril bici hasta llegar a Valencina y cruzamos el pueblo siempre en dirección contraria. ahora nos espera una buena bajada de 4 km. donde cogemos velocidades de hasta 64 Km/h. Ya abajo llegamos a Santiponce y vamos buscando su salida por el campo de tiro que nos lleva a la SE-30. Cruzamos de nuevo el Guadalquivir y llegamos al estadio olímpico. La ruta se está acabando para Mario ya que al llegar al Alamillo giramos para Torneo y al poco lo abandono. Yo continúo mi marcha siempre por carril bici hasta el Parque de Mª Luisa donde tras cruzarlo reemprendo mi día con el carril bici que me lleva a Montequinto.

Buena ruta y llana que de vez en cuando apetece.

Montequinto – Hacienda de Mendieta

Tras el palizón del sábado, la idea era quitarme las agujetas con una etapa llanita y de carretera. Bueno tuve que elegir la carretera ya que la de montaña la he llevado al taller para que me miren los frenos y no podía salir hoy con ella.

Salgo de casa sobre las 8,40 en dirección a Dos Hermanas y el escaso viento que hace lo llevo en contra. Paso la ciudad muy tranquilo y poco a poco voy cogiendo ritmo. Al llegar a la vía de servicio es donde me da más el aire ya que nada me cubre de él.

Al llegar a la glorieta de la Hacienda Mendieta vuelvo hacia casa pero el viento a favor se nota y los km. pasan muy deprisa.

Hasta la subida al hipódromo que debería haber sido lo más complicado con el viento a favor se ha llevado muy bien.

Ya en casa a estirar que el miércoles salgo con la de montaña con Mario.

Arroyo de la Plata – El Castillo de las Guardas y sierra de Aznalcóllar

Esta maña a las 7 de la mañana he recogido a Julián y lo sorprendente a esa hora eran los 29º y el viento que no paraba de merced los árboles. Con esos atenuantes nos disponíamos a realizar una ruta de las durillas. Llegamos a Arroyo de la Plata antes de las 8 y esperamos a José Carlos que es el último que forma el grupo.

Salimos del pueblo por carretera en dirección a Aracena y los pocos mts. nos adentramos por las calles que nos llevan a la Rosaleda de la Plata. Es una trialera que poco a poco la vamos pasando. Llegamos a una cancela que la abrimos y giramos hacia la Ribera del Guadiamar. La cruzamos y vamos por su orilla suroeste. Este tramo lo hacemos muy lento ya que no siempre vemos el camino trazado y vamos campo a través o por alguna trialera imposible para nuestras técnicas. José Carlos se lleva el primer susto del día que yo no lo veo bien ya que voy el primero pero al girarme lo veo con la rueda delantera clavada y la trasera levantada con el en medio de la bici. Los sustos paran y el camino empieza a mejorar al acercarnos a El Castillo de las Guardas.

La llegada al pueblo es en subida y un hombre con un torito de los de descargar nos da paso por lo que aumento el ritmo, José Carlos que me sigue y nos desviamos del track para ir al bar a desayunar. Pasan los minuto y Julián no llega. Lo llamo y resulta que se había pasado siguiendo el gps, retrocede y desayunamos.

Volvemos a las bicis y hay que escalar el pueblo. Siempre en contramano salimos de él. Tres km. de subida por asfalto para llegar a la cima. El firme es muy bueno y el porcentaje bastante mantenido al 5% menos las rampas del pueblo que pican alguna al 11%. Arriba espero a José Carlos y a Julián y encaramos la parte más tranquila del día, la bajada hasta la Colada de los Camellos. La bajada comienza por carretera pero al poco giramos a la izquierda para coger tierra que la abandonamos de nuevo cerca de El Pedrosillo. Al llegar a esta aldea giramos a la derecha y abandonamos la carretera para casi todo el día. El descenso continúa hasta que cogemos a un 4x4 achuchando a un grupo de vacas. En un giro amplio a derechas el coche nos deja pasar y poco a poco el ganado también. Llegamos a la Colada y giramos a la derecha para buscar el camino que nos a de llevar a bordear la Loma de las Moriscas.

Tras cruzar el Arroyo del higuerón que viene seco giramos para subir a La Atalayuela, 1,3 km. al 5,3% pero lo más duro al principio ya que tiene un respiro de 300 mts. en medio que apenas tiene desnivel. Bajada un poco peligrosa para mi gusto hacia el Río Agrio que tiene pequeño puente roto para cruzar. Estamos a los pies de la subida a Los Caballeros que va a ser la subida más dura del día, 3,2 km. al 5,3% ya que tiene dos zonas de descansillo. La primera parte son 700 mts. al 7,1% donde nos separamos los tres. Después viene un descansillo de unos 700 mts. apenas ascendentes para de nuevo subir 800 mts. al 7,7%. Llegamos al segundo descansillo de 400 mts. incluso con una ligera bajada y finalizamos con un tramo de 600 mts. al 5,8%. Arriba pedaleamos durante 1,6 km. con algún tobogán pero donde de nuevo cogemos velocidad.

Cogemos un pequeño tramo de carretera y encumbramos el Puerto del Barrial y giramos para ir a bajar el Parroso. Esta zona es completamente nueva para los tres. Nos faltan 6,4 km. para llegar de nuevo a tramo conocido. En este tramo es donde empiezo a no quedarme sin freno pero a chirriar que creo que las pastillas están en las últimas. Subimos la Loma de la Parrita y bajamos por un tramo muy roto hasta el Barranco del Portillo. Ascendemos unos 800 mts. a poco desnivel pero el calor se empieza a notar. Me quedo con solo un bidón a falta de 23 km. Llaneamos un poco bara bajar 1,7 km. al 8%, realmente intento no coger mucha velocidad pero es difícil. Enganchamos con el camino de ida y lo desandamos para llegar a la Colada de los Camellos que bien nos hubiese venido ser éste animal por la calor que nos queda y la poca agua. Vemos las vacas de la bajada.

Por delante casi 13 largos km. Mas adelante llegamos al Arroyo de los Castrejones que tiene un puente roto por donde no podemos cruzar y pasamos por abajo. No elijo un bueno desarrollo y se me clava la rueda delantera y salgo lanzado por arriba de la bici impactando con el sulo con la cadera y el codo derecho. Si más pronto me caigo más pronto entre risas me levanto. Ahora nos viene una rampa de 600 mts. al 7% que me hago con el manillar girado hacia la izquierda. Para arriba y tras aflojar la potencia y enderezar, aprieta de nuevo y para adelante.

Nos falta dos km. para cruzar la carretera que une El Castillo con Aznalcóllar y con el viento en contra no parece llegar nunca. Intentamos ir juntos para pararles el viento en todo lo posible a José Carlos y Julián que empiezan a atrangantarseles la ruta. Una vez cruzada la carretera el tramo hasta la unión con el camino que une Gerena con Arroyo no lo conozco y se me hace duro a mí y a mis compañeros. Casi 7 km. de toboganes donde algunas subida cortas pero muy duras hacen que se eternice llegar arriba de ellas. Al llegar al cruce llamo a Julián y quedo con él en que me esperará al lado de la carretera y yo iré a por el coche. Espero a José Carlos que me dice que está muerto y elige la opción de Julián. 2,5 km. hasta legar a la carretera les resta a ellos y a mi.

Llego a la carretera y voy seco sin nada de agua y al pasar por una casita le pido agua a una mujer que está barriendo. Duda un poco pero me la ofrece. Lleno un bidón que de golpe cae y lleno de nuevo para seguir. Por delante 1,8 km. al 4,2% que los subo con molinillo y al coronar me dejo caer los dos últimos km. para llegar al coche.

Cargo mi bici y compro dos botellas de agua para mis amigos ya que yo en verano siempre me llevo mi neverita con un botella. Recojo a José Carlos y entrego las botellas y volvemos a por su coche. Recojo a Julián, cargamos su bici y para casa.

La dura más ruta del año no por km. ni por desnivel acumulado sino por calor, viento en contra y terreno arenoso y rocoso.

http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=1960665

Aznalcóllar

Ayer tras una llamada de Mario decidimos quedar en Aznalcóllar para hacer la ruta de la Diputación pero a la inversa que Mario nunca la había hecho.

A las 7,30 estabamos preparados pero la noche todavía era bastante oscura. Desayuné en el bar ya que Mario solo quería un café y a eso de menos cuarto nos montamos en la bici.

Vamos en dirección al Puente de Zapata y el frescor de la mañana es incluso algo gélido pero sabemos que por desgracia no lo tendremos más, o eso creíamos. Giramos en dirección a El Álamo y al llegar a la zona de Cañada Honda giramos en dirección a Charcofrío. Por delante nos quedan 9 km. donde ascendemos 230 mts. Lo malo el terreno que es arcilloso y nos va lanzando nuestras ruedas un polvo marrón a todas las partes de la bici y nuestras piernas. El ritmo es alto y en algún repecho Mario baja un poco el ritmo que parece que no subimos pero no es verdad.

Al llegar a Charcofrío descansamos un instante y nos lanzamos cuesta abajo, bueno Mario ya que yo bajo de pena. El carril esta roto por tramos de curvas que te hace tomarlas muy lentamente. Abajo cojo a Mario y comentamos que la sensación de frescor de esta mañana ha vuelto entre la bajada y lo sombrío de la zona. Tras un km. comienza  la subida dura del día, 5,4 km. con 192 mts. de desnivel, aunque la parte mala es los primeros 1,4 km. al 7,8% donde ascendemos 112 mts. Mario me libertad pero decido ir a un ritmo tranquilo en el que poco a poco lo voy dejando pero siempre con la mirada para no dejarlo muy atrás. Arriba del primer tramo duro lo espero pero sin pararme, es decir, bajando la velocidad. Una vez que me coge vamos en busca de la carretera  y en un repecho corto me dice que este lo corona, y así fue.

Al llegar a la carretera cogemos dirección Aznalcóllar y tras 1,8 km. donde damos cumbre al Alto del Carrizal llegamos de nuevo a la tierra. Por delante nos quedan 9,4 km. bastantes sencillo donde solo ascendemos 25 mts. por contra bajamos 266 mts. Los km. pasan rápidos y sin darnos cuenta llegamos a cruzar el Barranco de Tejadilla donde comienza una de las últimas subidas. Tan solo 1,5 km. al 5,2% pero que después de un rato bajando cambiar a subir cuesta un poco. Arriba espero a Mario y no vamos en busca del Puerto de la Cruz que lo pasaremos bajando.

Al empezar la bajada veo a dos curvas un grupo de vacas sueltas y vamos frenando hasta llegar a su altura. Ellas empiezan a correr cuesta abajo y como podemos adelantamos a una pero las otras tres siguen por delante hasta que sale un pequeño caminito por el que se desvían y continuamos la bajada.

Llegamos a la subida de la Casa de la Sebastiana, 600 mts. al 6% y llegamos a la carretera. Circulamos por ella con varias vaivenes hasta llegar a la zona de Manogallo donde cogemos la trialera ascendente de 240 mts. al 14%. Entre su dureza y lo técnico del terreno casi arriba ponemos pie y continuamos andando. Al montarnos nos viene otra trialera pero en bajada de 700 mts. que nos deja muy cerca de la carretera o más bien del pueblo, ya que una vez que llegamos ya empezamos a callejear por el pueblo en busca del coche.

Bonita ruta, diferente a la típica que solemos hacer

Bollullos – Villamanrique de la Condesa

Menos mal que soy de los que no le importa madrugar, ya que la SE-30 estaba corta en el puente de San Juan y que cuando hemos terminado la etapa el calor era sofocante. Bueno voy al lio y cuento que ha pasado.

Cuando llego a Bollullos me estaba esperando pero debemos de esperar un poco antes de salir ya que no se ve bien todavía. A las 7,15 nos lanzamos al camino. Quitando la salida del pueblo que son 400 mts. ya abandonamos la carretera casi hasta el final de la etapa. Cogemos el Camino de Rianzuela que sobre el km. 3,5 pasa a llamarse o se une mejor dicho al Cordel de Triana.

En el km. 8.4 giramos a la izquierda y comienza la zona más estrecha y con bancos de arena, pero solo eso, bancos que se van pasando con más pena que gloria. En el km. 10 llegamos a  la Colada de Villamanrique y los bancos desaparecen y se unen en un gigante. Vamos muy despacio funambuleando con la bici hasta que un viejo nos pasa con un ciclomotor por un carril por la izquierda que no lo habíamos visto. No es una autopista pero mejora mucho lo que llevamos.

Al llegar al Monumento al Guarda hacemos dos giros de 90º primero a derecha y seguido a izquierda para coger el Cordel del Camino de los Playeros. Con ese nombre debería de ser una duna pero que va el firme es muy bueno y comenzamos a subir la media que no estaba siendo muy alta. Llegamos al Vado del Quema sin pararnos y buscamos Villamanrique para comernos la tostada. Ahora circulamos por la Cañada de los Isleños hasta el cruce con la Cañada real del Carrascal que nos lleva al pueblo.

Tras la tostada y las risa de ese momento con un hombre que chillaba como no hemos oído en la vida, nos volvemos a las bicis y cogemos la Cañada que nos llevó al pueblo. En el km. 26 la abandonamos en busca del Corredor Verde que al llegar al río no hay que cruzarlo, cosa que nosotros hemos hecho y hemos tenido que desandar nuestros pasos. Ahora vamos por la orilla oeste del Guadiamar hasta llegar a la carretera de Bormujos a Pilas que la cruzamos y buscamos de nuevo el Corredor. Hemos dado un rodeo un poco tonto pero hemos llegado.

Ahora vamos por la orilla este y dejamos Aznalcázar a nuestra derecha en lo alto. El camino no entraña ninguna dificultad y aunque el ritmo es alto no lo es como antes de llagar a Villamanrique ya que sabemos que nos toca la subida dura del día. Paramos debajo del puente de la autopista a hacer pis, y le comento a Mario:

- Te imaginas que se cae el puente y después sacan a dos tíos con la cosita fuera y con ropa ajustada.

Tras charlar un poco comenzamos la cuesta. Mario me dice que yo a mi ritmo pero la verdad es que en el tramo que íbamos a muerte no se alejaba así que no me fiaba mucho.

La cuesta nos la conocemos al dedillo. Son 1,7 km. al 4,6% con la rampa final al 7% que te deja como para esprintar. Vamos juntos a buen ritmo hasta que noto que voy solo. Tras un km. hay un descansillo y vuelve a picar y al mirar veo que Mario irá unos 30 mts. por detrás. Poca distancia como para fiarse. Sigo a mi ritmo y acometo la rampa final dudando si plato mediano o chico y la verdad es que es un pena tenerlo y no usarlo. Ya arriba espero a Mario y tras un ligero descansamos continuamos.

La ruta debería continuar ya sin sobresaltos, hasta que tras Benacazón están echando piedras más o menos gordas para después pasar la apisonadora, pero este tramo es largo o al menos se lo hace. Por fin llegamos al cruce de Umbrete donde el carril ya no empeorará. Los km. van pasando y la calor va subiendo. Llegamos a Bollullos y lo cruzamos cuesta abajo para llega al coche.

Tras estirar y montar la bici para casa que el jueves me voy a Roquetas 5 días.

Por la tarde he limpiado las dos bicis y estoy reventado.

Santiponce – Media Fanega

Esta mañana hemos salido Paco y yo en dirección a Santiponce en el coche donde hemos esperado a su amigo Alfonso. Una vez estábamos los tres listos, hemos emprendido la marcha.

Alfonso que hace casi dos décadas que dejó de ser profesional de la bicicleta de carretera se acaba de comprar una Kuota que es un pepino de bici, pero lo que le falta es coger fondo y la etapa de hoy no era la mejor. Nada mas salir del pueblo y llegar al cruce con la N-630, que no la soltaremos en todo el dia, veo que un ligero  repecho se le atraganta. El ritmo es lento, tanto que nos pasan llegando a Las Pajanosas un grupo de ciclista en bici de montaña.

Desayunamos y volvemos a las bicis. La parte más dura viene ahora y me dan permiso para que intente coger a dos carretereros maduritos que suben a buen ritmo. Los alcanzo sufriendo un poco y entablo un conversación que nos lleva hasta la Venta del Alto donde espero a mis compañeros. Aparece Paco que le ha dicho que nos pillara y que fuéramos bajando y subiendo la Media Fanega. Nos lanzamos por la parte nueva los 3,8 km. al 5,6% en bajada. Si dar pedales alcanzas casi los 60 km/h, pero esa postura me carga mucho el cuello y deseo llegar abajo.

Giramos 180º para coger la parte vieja que son 4 km. al 5,1%. Para mi mas dura física pero no mentalmente ya que las curvas no son tan amplias como en la nueva que nunca llega el final. Arriba llego y veo a Alfonso y al poco llega Paco.

Nos lanzamos cuesta abajo sobretodo estos dos y pasado Las Pajanosas nos pasan dos chavalitos a muy buen ritmo. Alfonso pilla rueda y nosotros detrás de él. Pero como me veo venir un repecho le paso ya que se que se va a quedar y como les pierda la rueda se me van. Aprieto los dientes y los aguanto en dos o tres repechos que nos vienen hasta que nos separamos a la entrada de Santiponce. Los espero y tras montar las bicis nos tomamos un refrigerio en el bar.

Las Pajanosas – El Castillo de las Guardas – Aznalcóllar – Gerena – Las Pajanosas

Tras el buen resultado del otro día, me propongo una ruta un poco más dura. No se si los nervios (como si fuese un niño chico), que me despierto dos horas antes de que suene el despertador. Al final a las 6,15 empiezo a arreglarme con tranquilidad. Tras subir la bici al coche, pongo rumbo a Las Pajanosas y a las 7,15 estoy allí. Descargo, guardo y estiro y doy comienzo a la etapa.

Cojo la N-630 en dirección a El Ronquillo. El ritmo que llevo es muy tranquilo ya que solo por mi cabeza pasa la frase:

- Guarda José Antonio que queda mucho.

Y eso hago. En la más mínima dificultad tiro de plato pequeño y las piernas siempre las llevo con agilidad.

Los 9.4 km son por la N-630 y casi siempre ascendentes, 185 mts. desnivel acumulado. Al llegar al cruce con la N-433 la cojo y me pego 5 km. bajando con pendiente o bajando llaneando. Tramo que aprovecho para recuperar las piernas. Ahora me viene un pequeño montículo a la altura de la Urb. El Alisar para dejarme a los pies de la subida a El Cañuelo. No es una subida de grandes desniveles, pero si más largas de las que llevo. Apenas 1,6 km. al 4,5%.

Una vez superado bajada hacia Arroyo de la Plata y me viene unos 4 km. ascendiendo para llegar al cruce con la A-476. La mejor carretera que he cogido ya que han sido 1,7 km. bajando para coger la SE-4401 que me ha de llevar a El Castillo de las Guardas. Para llegar al pueblo me falta 400 mts. al 6,5% pero que los llevo con mi frase en la cabeza y oliendo a la tostada que me voy a comer.

Tras el refrigerio continúo mi etapa en busca de Aznalcóllar. Me quedan por delante 28.9 km. donde la cabeza me dice que son fáciles pero la realidad es otra, ya que desciendo 681 mts. pero subo 494 mts.

La verdad es que sin saber los datos solo pienso en que una vez que pase los primeros 5,7 km. el resto es bajada, y eso hago los paso con la cabeza siempre pensado en deja algo para luego. Una vez pasado este escollo me lanzo en las bajadas y debo de para por que en un cambio de rasante al subir al plato se me sale la cadena por fuera. La arreglo y continúo. Los paisajes de esta son de lo mejor del día.

Por fin llego al puente de Zapata y asciendo a Aznalcóllar que la paso y bajo por la A-477 hacia el corredor verde. La carretera es ondulante pero sin grande dificultades, excepto la primera subida nada más pasar el corredor verde. Me voy dirigiendo a Gerena que la bordeo por su circunvalación y voy en busca de la N-630. Antes de llegar a ella debo de subir un km. al 3% que se me hace un poco largo.

Ya en la nacional solo falta 4,6 km. donde asciendo 86 mts. que sin grandes pendientes es un continúo sube sube. Por fin llego y a deshacer todo lo que hice para llegar a Las Pajanosas excepto volver a montarme en la bici.

Montequinto – Utrera

Tras un pequeño parón por molestias en la rodilla, he salido a probar y las sensaciones muy buena. La pomada que me han mandado va de fábula.

Estos días he aprovechado para quitarle el dichoso ruido a la bici de carretera y al final ha sido la tija la que daba el ruido. También he probado los pedales de carretera pero no voy del todo cómodo.

Al final he tenido que salir por la tarde ya que Merchi trabaja hasta el jueves y a las 6,30 con un poquito de calor he salido en dirección a la gasolinera para darle aire a las ruedas. He salido con tranquilidad hacia el hipódromo para llegar a Dos Hermanas y el viento creía que me iba a dar en contra yendo hacia Utrera pero al final ha sido de costado y un poco a favor con lo que me he encajado bastante rápido en Utrera.

Sin parar doy la vuelta en la rotonda y comienzo a notar el “enemigo invisible”. Intento tirar de coco y me relajo y que pasen los km. que algún día llegaré a casa. Había tramos, los menos, en lo que he tenido que poner incluso el plato pequeño.

Con la calor empiezo a beber cada tres km. para llegar con algo en los bidones y no dejarlos secos en mitad de la ruta. Ya subiendo hacia el hipódromo calculo y bebo con más tranquilidad.

Al llegar a casa un buen rato estirando y a la ducha.

Villaverde – San Benito

Últimamente las macro quedadas parecen una quimera. Tras varios días viendo quien iba a venir por un motivo o por otro solo quedamos Julián y yo.

Salimos sobre las 7,40 y Julián no acabamos de salir y quiere hacer una paradita en mitad del campo para agüitas menores. Total que salimos y se lanza a un ritmo que no lo puedo seguir. No llevamos ni 100 mts. y tirando como un loco. decido ir tranquilo que el dia es largo y además se debe de parar. Una vez que se para y lo rebaso sigo yendo lento hasta que me engancha y ponemos ritmo para subir el Cebrón.

Voy en todo al ritmo de Julián y le voy comentando lo que queda ya que hace dos semanas lo subí y me acuerdo de algo. Cuando llegamos a la parte dura lo dejo y tiro para adelante. No paro arriba y me dejo caer y poco a poco la distancia es más corta hasta que me alcanza.

Continuamos dando pedales y llegamos a Castilblanco donde desayunamos. Volvemos a las bicis y buscamos el camino que nos ha de llevar a San Benito. Al principio es por carretera con algún que otro bache pero después pasa a camino de tierra y muy bacheado por las rodadas de maquinarias.

Estos 11 km. que separan el pueblo de la ermita son llanos con algún tramo de bajada  sobre todo al llegar a la ermita. Tras un poco de charla volvemos nuestros pasos y ahora nos toca ascender los 600 mts. al 9% para volver a llanear hacia el pueblo. La subida la hago muy lenta esperando a D. “Agüitas menores” y una vez que me engancha pedaleamos hacia el pueblo con ligero viento en contra. La velocidad no es muy elevada y vamos todo el rato juntos. Cerca del pueblo casi nos sucede un percance al caérseme un bidón y entre que lo evito o no Julián me comenta que casi me come.

Cruzamos el pueblo y vamos en busca de la bajada del día. Es un poquillo peligrosa ya que las piedras sueltas las han cambiado por arena suelta y tenemos el miedo de clavar la rueda y salir volando. Pasamos el tramo malo y nos lanzamos bastante rápidos hacia los coches.

Ya en las proximidades de Villaverde me comenta que hoy me ha leído muy bien el culotte. Si es que no se puede dar pan al hambriento que te come la mano.

Buena ruta y para casa.

Mina – Rilla - El Herrero – Alcolea – Mina

Muy temprano hemos quedado Mario, Julián y yo para hacer esta ruta. Salimos en dirección a Constantina durante 3 km. ya que nos sale el cruce hacia la depuradora del Huesna. Antes de llegar a ella empieza lo bueno. Comenzamos con un repecho de 200 mts. al 10,7% para bajar levemente y subir otro también de 200 mts. al 14% con un tramo al 19%. La subida de ser asfaltad cuando empieza a bajar la pendiente y continúa cerca de 300 mts. al 4%.

En la parte dura no paro de mirar a Julián no vaya a ser que se pase el cruce, que al final se lo pasa y le doy un buen grito y retrocede sus pasos. arriba esperamos a que llegue y nos lanzamos cuesta abajo para hacer un V perfecta al llegar al Arroyo de Rilla donde comienza la 2ª subida.

Ahora nos toca 1 km. al 8,1%  donde nos vamos Mario y yo hacia delante. Ya casi arriba se descuelga un poco. Pero al llegar arriba no acaba la subida, ahora toca 3 km. al 3% con bastantes toboganes y piedra suelta. En una buena sombra los espero y seguimos en busca de la última subida dura del día.

Pasado el Cortijo de Rilla Alta nos espera 1 km. al 7,2% pero que entre la piedra suelta, los regajos ocasionados por las lluvias y que los primeros 700 mts. son cercanos al 9% nos deja muy justos en la cima. Mario al llegar comenta lo duro que es y si la ruta va a ser todo el rato igual. Un poco más tarde llega Julián y nos lanzamos cuesta abajo en busca de nuevo del asfalto.

Llegamos a la carretera SE-197 y vamos pedaleando hasta el cruce con la carretera por la que empezamos esta maña pero 20 km. más arriba. La cogemos en dirección a la Mina y ascendemos un pequeño puerto, el puerto de Melilla. Bajamos por fin un buen trayecto de 4 km. hasta el cruce co el Herrero. No esperamos a Julián y subimos un repecho y seguimos bajando por un carril que se estrecha a veces por la maleza.

Al llegar a Las Lapas de Matilla, tras esperar a Julián un buen rato cogemos el Camino de Alcalá del Río a Constantina. Su primer tramo es pegado a una valla y a la maleza. Vamos muy lentos y bajándonos mucho de la bici. Por fin empieza a clarear el carril y comenzamos una bajada más rápida entre olivos, naranjos y melocotones. Al llegar a la antigua carretera que une Sevilla con Córdoba esperamos a Julián. El rato se hace largo pero es que la inactividad de un mes lo tiene frito.

Llegamos a Alcolea todos juntos y nos dirigimos a la Mina. El pelotón no se rompe más hasta llegar al puente del Arroyo Galapagar donde vamos ascendiendo. Pongo un ritmo lento pero poco a poco Julián se queda y seguimos los dos hasta llegar al pueblo donde lo esperamos.

Vamos a mi casa donde saco unas coca-colas bien fresquitas y los acompaño donde tienen el coche.

Buena y dura ruta la de hoy.

Montequinto – Utrera

Esta tarde después de ver el tour, he quedado con Paco para salir con la bici de carretera.

Hace bastante calor pero una vez que pedaleas se mitiga un poco. Vamos a la gasolinera a llenar las ruedas y ya listos salimos hacia Dos Hermanas. Al llegar al hipódromo nos metemos por él.

Sus cuestas nos exprimen un poco pero la mayoría es bajada. Llegamos a Dos Hermanas y la bordeamos en busca de la vía de servicio de la autovía de Utrera. El ritmo es alto favorecido por los relevos y que el viento entra de costado por atrás. Los km. van pasando y al llegar a Utrera, Paco quiere tomarse algo.

Tras unas refrescantes coca-colas (bueno pepsi), volvemos a las monturas. El viento no ha cambiado pero nosotros si y el ritmo es más lento. Poco a poco llegamos a Dos Hermanas y de nuevo tiramos por el interior del hipódromo. Tras cruzarlo llegamos a Montequinto y a nuestras casas donde estiramos y duchita.

Villaverde – Castilblanco – Viar - Villaverde

De nuevo en ruta por la sierra norte de Sevilla, pero esta vez empezando desde la Vega.

Quedamos solamente Mario y yo en Villaverde a las 7,30 de la mañana para evitar el calor. Al salir comentamos que se mueven mucho los árboles y que está fresquita la mañana. Cuando salimos del pueblo en busca de la carretera de Burguillos nos viene el aire del costado derecho pero no nos elentece mucho la marcha. Cuando giramos y cogemos el carril de tierra si notamos más en contra el viento. Nos vamos intercambiando la posición para evitar la dureza del “invisible”.

Al llegar a la altura del Viar se acaba el llaneo. Nos viene por delante la subida al Cebrón, tal vez la más dura hasta la fecha por el viento. Sus 5,7 km. al 4,9% no parece que sea realmente dura esta subida, pero si no tuviera dos descansillo, incluso en bajada el último, este puerto podría ser el mas duro de Sevilla por pista de tierra.

Vamos los dos, uno detrás del otro, pero en uno de mis relevos veo que Mario se queda. Lo espero ya que solo no se va a ningún sitio y lo llevo hasta el último descansillo donde me da vía libre para llegar arriba. Este último tramo es horrible. Tiene un tramo de 800 mts. al 8,4% y si le sumamos lo deteriorado del terreno parece más pendiente incluso.

Ya arriba sigo pedaleando hasta que me coge y nos lanzamos a por Castilblanco donde nos espera dos pedazos de tostadas que nos cuesta acabar. Tras comer y charlar nos volvemos a nuestras monturas.

Salimos en busca de la carretera de El Pedroso que va normalmente en bajada hasta subir a la cota más alta del puerto de Los Melonares donde nos viene una bajada de 4,7 km. Abandonamos la carretera al llegar a la altura del Canal del Viar. En este punto dudamos por donde llegamos al canal ya que la cancela de la vivienda esta cerrada y el campo a través esta con mucha maleza. De repente vemos una cancela abierta que nos lleva al canal. Este repecho no contábamos con él.

El camino al lado del canal es muy fácil excepto 5 tramos en los que cogeremos repechos para poder seguir cerca del canal que pasa de un lado al otro de la montaña por un viaducto o por algún subterráneo.

Por fin abandonamos el canal y cogemos dirección al pueblo donde nos espera el coche. El viento a desapareció después de la tostada excepto en algún tramo muy corto y la calor aumento considerablemente.

Buena ruta en la que por fin me he notado bien de fuerzas.

¡Qué mal!

Que ganas tengo de disfrutar una ruta ya que últimamente no las paso muy bien. Bueno al lio. Este fin de semana estoy en la Mina y aprovecho para salir a las 7,30 y hace una ruta por la sierra. Salgo en busca de la Rivera del Hueznar y llegar subo hacia el barrio de San Fernando.

Lo cruzo muy rápidamente ya que no es muy grande y cojo el Cordel del Pedroso. es un sube y baja donde subo más que bajo hasta llegar a la estación de Arenillas.

Cruzo la cancela y entro ya en zona de dehesa. El terreno tiene mas tramos técnicos ya que tiene muchas zonas de aguas no permanentes por éstas fechas. Llego al cruce de Mulva y me dirijo a él pero al llegar veo que la cancela no la abren hasta las 10. A estas alturas de la película el cuerpo se me empieza a retorcer y terminará en Gastroenteritis (2 en apenas dos semanas). Retrocedo mis pasos y al llegar al cruce de antes sigo en dirección a El Pedroso para ver si el Cordel sigue con la cancela cerrada.

De repente me sale un ciervo a menos de 50 mts. huyendo de mi. Que poco me conoce. El terreno esta cada vez mas desquebrajado y al llegar a la cancela esta cerrada pero sin los bidones pero mi cuerpo no tiene ganas de seguir. Retrocedo mis pasos y los caminos de vuelta me los encuentros llenos de vacas o toros. Los paso con bastante cuidado y llego de nuevo a Arenillas.

La vuelta hasta la Rivera es mucho más rápida y ya solo me queda subir. Aún estando malo subo bastante rápido y me viene recuerdos de cuando era pequeño y se me hacia un mundo subir el pueblo.

Espero que la próxima salida me respete las gastroenteritis.

Montequinto – Hacienda Mendieta

Qué calor que he pasado en lo alto de la bici. Salí de casa hacia las 7,30 de la tarde pero no se había ido todavía el sofoco. Hice el camino de costumbre hasta la glorieta de la Hacienda Mendieta pero con un viento a veces fuerte, sobretodo en la ida.

Las fuerza muy justas. Próxima ruta en la Mina si todo va bien pero solo.

Guillenazo invertido

Tras recuperar la bici ayer del Decathlon, quedamos José Carlos y yo para salir desde Guillena. Cerca de las 8 de la mañana comenzamos en dirección al P.I. El Cerro, con más tráfico del deseado. Por fin en él, empieza el carril de tierra arcillosa que al no llover en tiempo esta compactada pero con grandes surcos.

Empezamos a dejar a peregrinos a nuestras espaldas y llegamos a la trialera. Nunca la he subido sin poner pie a tierra y ya va a ser que no. Los surcos ahora son gigantes y rara es la vez que no tengas que soltar el pie del pedal. José Carlos para se su primera subida no la ha hecho muy mal. Lo peor mis retortijones de barriga que no veía la hora de llegar al pueblo. Ya fuera de la trialera cogemos carretera y siempre ascendiendo llegamos a Castilblanco, donde aparte de desayunar hago otra cosa.

Continuamos la marcha y vamos buscando cruzar el pueblo de este a oeste, para llegar a un camino de tierra que nos lleva al cruce de la pista que lleva a los Lagos del Serrano. Nos toca bajar mayormente hasta el Embalse de Castilblanco. Cerca de éste a José Carlos se le cae un bidón y yo lo evito en lo que puedo.

Ya se ha acabado la parte fácil del día, excepto la trialera, y nos viene la primera de las subidas duras. Comienza con 1,4 km. al 7,1% para llegar a un leve descanso y proseguir durante 2 km. de toboganes con alguna rampa del 9%. Al llegar al cruce de la cuesta de Los Toros descansamos y le comento  que no voy nada bien. Hemos ido todo este trayecto juntos y yo sufriendo para poder ir al ritmo que a veces me marcaba.

Descendemos hacia el Embalse de Guillena y justo llegando a José Carlos le suena la bici un petido fortísimo de aire. Creo que ha pinchado pero las ruedas se ven bien. Resulta que la horquilla le ha perdido el aire de golpe. No va todo lo fina que quisiera pero amortigua lo suficiente. Subimos un primer tramo de 700 mts. al 7% que nos deja en dirección a la Lenteja que la afrontamos del tirón.

La verdad que esta subida la conozco de maravilla y aún que estaba faltísimo de fuerzas he conseguido llegar arriba. Desde abajo se me enganchó atrás y la verdad creo que iba más fuerte que yo pero nunca se puso delante. A falta de 700 mts. viene la penúltima rampa y le ataqué, por que una cosa es estar malo y otra no atacar, pero al rato lo llevaba detrás con lo que bajé el ritmo para que me diera en la frente que me conformaba, pero como no lo hizo antes de llegar a la última rampa viene un ligero descenso donde le di un hachazo y a muerte esos 200 mts. al 6%. Llego bastante cerca pero le comenté que había perdido una oportunidad.

Ya solo nos queda bajar y sortear dos repechos que a estas alturas del día con la calor que hace se hacen tela de duro sobretodo el último que recuerdo que le dije que parecía el Tourmalet y dijo que no era tanto, pero una vez en él también se lo pareció.

Ya por fin en los coches y para casa a descansar

PD: Al final no me puedo quejar de como me ha ido ya que creo que la falta de fuerza ha sido debida a una gastroenteritis que estoy pasando en éstos momentos.

Montequinto – DH – Utrera – El Viso – Mairena – Alcalá

Al final he cambiado de planes y he salido de casa ya que estaba muy cansado de esta semana como para encima levantarme más temprano e ir con el coche a algún punto de Sevilla.

Tras el desayuno, me prepare y cogí la bici y me dirigí a la gasolinera a echarle aire a las ruedas. Una vez preparado comencé la ruta. Salgo de Montequinto hacia el hipódromo para bajar a Dos Hermanas que la bordeo por su avenidas periféricas. La salida de Dos Hermanas la hago por la carretera A-8031 que me lleva a la vía de servicio de la A-376. Esta ya no la suelto hasta llegar a Utrera.

En Utrera hago igual que en Dos Hermanas, voy por las afueras buscando la carretera de Écija la A-394. Esta tiene un poco de tráfico pero un arcén muy grande y limpio. No duro mucho por ésta ya que llego a la carretera de Morón, la A-360, que la cojo en dirección a Alcalá de Guadaira. Por esos momentos pienso en cambiar la ruta que ya hice otra vez y al llegar al cruce con la carretera de Carmona me meto por ella. La ausencia de viento durante todo el día me ayuda a elegir el cambio de planes.

Ahora voy por la A-8100 que no tiene arcén ni tráfico. Pasan lo km. y por fin llego al cruce con la carretera SE-3200 que me lleva hacia El Viso del Alcor. A lo lejos voy viendo el pueblo en la altura y confío que no se muy dura ya que estoy un poquito justo a éstas alturas. A las faldas del pueblo comienza la subida, 800 mts. al 5,2% donde los pasos con más pena que gloria. Callejeo hasta encontrar la A-398 que me ha de llevar a Alcalá pasando primero por Mairena. Hasta la salida de Mairena es un continuo acelerar y frenar por los semáforos, pero a la salida empiezo a perder altura hasta llegar a Alcalá, donde la carretera pasa a llamarse A-392

De nuevo acelerones y frenazos pero más rápidos ya que debo de cruzar la ciudad en bajada hasta el puente romano. Ya abajo comienza de nuevo la subida y el peor tramo del dia ya que están de obra desdoblando la calzada y esta muy estrecha y tiene tráfico. Paso por lo alto de la autovía de Utrera y bajo hacia Dos Hermanas que de nuevo la bordeo en busca del hipódromo. Tras llegar a él, que está en alto, ya estoy en Montequinto y sigo acumulando km. por sus calles para llegar a la cifra de 100 km. y por fin en casa con un cansancio considerable.

Venta del Alto – El Ronquillo – La Cantina – Venta del Alto

Esta mañana hemos quedado solamente Julián y yo. Hemos ido hacia Venta del Alto para hacer nuestra rutita de árboles y pajaritos.

A las 8:15 nos hemos montado en las bicis y lo peor ha sido de golpe bajar la Media Fanega frescor de la mañana. Por fin abajo nos encaminamos hacia Las baterías pero al llegar al Embalse de la Minilla nos adentramos por su orilla este.

Nos viene por delante un tramo de 6 km. sin ninguna dificultad en la orografía, solamente esquivar las piedras de los desprendimientos que habrán habido este invierno con las lluvias.

Llegamos al inicio de la cuesta de Cantarranas. Hemos ido todo el rato juntos durante los 4 km. del trayecto ascendente. Normalmente le iba hablando a Julián que me contestaba jadeando (suena un poco mal pero es la verdad). Por fin arriba, en El Ronquillo donde nos desviamos hacia un bar para desayunar unas buenas tostadas.

Tras el refrigerio volvemos a las monturas y nos dirigimos hacia los Lagos del Serrano, bueno más bien a una pequeña urbanización cerca de ésta zona. Los repechos comienzan a ser más continuos y la calor se empieza a notar.

Lo bueno es que comienza un tramo en la mayoría descendente que nos deja en el cruce que va a Castilblanco o a Guillena. Cogemos ésta última dirección y nos viene la bajada de la cuesta de Los Toros. Abajo volvemos a unirnos y charlamos de los que nos queda. Julián me comenta que la media está siendo elevada pero le digo es que mayormente hemos descendido.

Comenzamos a subir en busca del Camino que va hacia la Central del Cala, y al llegar a las casa cerca de la Hidroeléctrica descansamos un poco. Tras éste pequeño parón continúanos la marcha que ya es siempre en subida. Por delante 2,3 km. al 5,1% de media que nos castiga poco a poco. Y si no es la pendiente es el calor. Vamos buscándolas sombras en cada momento. Arriba descendemos unos mts. para llegar a la antigua Media Fanega. Respiramos un poco debajo del puente que nos cobija y empezamos la ascensión. Julián me comenta que prefiere ir solo y lo dejo atrás. Esta parte son 2,5 km. al 5,3% pero la carretera está muy rota por momento y dificulta el pedaleo. Con tranquilidad llego arriba y estiro hasta la llegada de Julián.

Montamos las bicis en los coches y para casa a refrescarnos. Lo que hubiera dado por una botella de agua fresquita a la llegada. En fin, otro día será.

Castilblanco – Almadén de la Plata

Por fin iba a salir al campo hoy con mi bici de montaña. Había quedado con Paco en el garaje pero ya me dijo que si no estaba no lo esperara, y eso hice. Me fui en busca de Julián y tras montar las bicis nos vamos camino de Castilblanco. Llegamos sobre las 8,20 donde nos espera Mario.

Tras preparar las bicis y a nosotros salimos en ruta. Sabemos que nos quedan por delante unos 16 km. de asfalto y ascendentes en su mayoría. El frescor de la mañana se hace notar y tras una pequeña bajada más incluso.

El ritmo es sin prisa pero sin pausa. Normalmente vamos los tres juntos comandando yo el grupo, Mario detrás y por último Julián aprovechando el  rebufo. Van pasando los km. y por fin llegamos al tramo más duro. Nada más pasar el Arroyo de los Vinateros, nos empieza a picar hacia arriba con más dureza, pero tras un ligero descanso subimos lo más duro. Un tramo de 1,4 km. al 6,1% de los cuales 800 mts. eran al 7,5%. Yo que iba con la idea de dejarme ir, en cuanto me subo a la bici me pruebo. Pongo una marcheta fuerte y cuando me doy cuenta Mario se ha descolgado pero las reservas de fuerzas se me van de golpe y voy viendo como poco a poco se me acerca cada vez más. Este periodo de inactividad me ha hecho perder no el reprís sino el mantenerlo.

Tranquilamente vamos Mario y yo acercándonos a la entrada del Parque de El Berrocal donde en su puerta esperamos a Julián. Ahora viene la parte que no sabía como iba a reaccionar mi cuello, el carril de tierra. Primero empezamos a perder mucha altura hasta que después poco a poco ascendemos hasta las faldas del Cerro de El Calvario. Los tres nos desmontamos de las bicis y comenzamos nuestra subida. Se hace eterna y eso que solo subimos las bicis vacías. Cuando hicimos el Camino de Santiago fue demasiado sufrimiento.

Al coronar no se ha acabado todo, ya que la primera parte de la bajada se puede hacer montado, pero el resto es bajado de ella y con mucho cuidado de no caerte. Llegamos al pueblo y buscamos un bar donde desayunamos y volvemos a las monturas ya que el calor nos está empezando a llegar.

La salida del pueblo es en subida pero se hace tranquilamente sus cerca de 2 km. al 3,7%, menos la parte final donde Mario pone un ritmo muy fuerte y yo me dedico a seguirlo. Llegamos al cruce de carretera donde esperamos a Julián y nos viene un buen tramo descendente. El ritmo en ésta parte ha sido bastante exigente pero a relevos hemos llegado a la entrada al parque de nuevo.

Ahora nos encaminamos hacia la bajada fuerte del día donde hemos cogido los 67 km/h. Mario y yo hemos continuado hasta la Finca La Yerbabuena donde hemos vuelto a ser un trío. Ya el resto mayormente juntos hasta el pueblo.

La verdad es que el cuello se ha comportado mejor de lo esperado y he notado como me falta bastante fondo.

Montequinto - Los Palacios

Tras dejar a Lucia en el cole y vestirme de ciclista salgo con la bici de carretera a dar un paseo hacia Los Palacios.
Salgo hacia el hipódromo y al bajar a Dos Hermanas giro para coger la carretera que va al P.I. Isla Menor. Una vez allí busco la carretera que me ha de llevar a Los Palcios pero antes a Adriano. La verdad es que la carretera está bastante regular hasta llegar a ésta pedanía ya que una vez pasada mejora un montón.
En un santiamén llego a Los Palacios que lo callejeo muy poco ya que cojo la N-IV en dirección a Dos Hermanas hasta llegar al cruce de la carretera que busca la A-476. Por esta carretera el tráfico es menor pero siempre me va picando hacia arriba y el calor de éstas fechas se empieza a notar. Por fin llego a la via de servicio de la autovía de Utrera que cojo en dirección Sevilla hasta llegar al cruce de Dos Hermanas, por el que me meto para ir a la ciudad.
La bordeo como de costumbre y busco la carretera que va primero al hipódromo y después a Montequinto por sus calles donde me relajo. Al llegar estiro bastante y para cas donde ceo que me he quemado los brazos. Ya no se puede salir sin protección

Montequinto – Utrera

Continúamos la preparación del cuello o mejor dicho vamos probando poco a poco como se comporta.

La idea de hoy era dos horas en la bici más o menos. Salgo de Montequinto hacia Dos Hermanas por el hipódromo y bordeo la ciudad en busca de la vía de servicio de la A-376. Las pulsaciones van entre el 60-75% cosa que me pone muy contento ya que creo que el viento, aunque leve, es en contra. Cuando me doy cuenta llego a Utrera a 27,2 Km/h y es donde nada más coger dirección de vuelta noto como el viento si era algo, era favorable.

Intento llevarlo de la mejor manera posible acoplandome a la bici pero las pulsaciones ya no suelen bajar del 70%. Voy pensando que llegaré sobre las dos horas y pico y lo intento llevar lo mejor posible, pero una vez en Dos Hermanas, donde controlo mejor las distancias y los tiempos veo que posiblemente llegué incluso antes.

Y así fue, ya que la vuelta la hice a 27,6 Km/h. Me obsesioné con el viento y no fui a las pulsaciones que me vendrían bien para ir cogiendo fondo. El cuello más o menos bien y el domingo prueba de fuego con mis amihos y la bici de montaña.

Montequinto – Hacienda Mendieta

Menos mal que la calor ha bajado un poco y se ha podido salir ésta tarde. La idea, aumentar un poco el rodaje para ver como se comporta el cuello.

Salgo hacia Utrera por el camino de costumbre hasta llegar a la Hacienda Mendieta donde llevaba 45 minutos que si los duplicaba me salía un aumento en éste estado de probatura en el que me encuentro.

La salida no ha acarreado apenas dificultad, ya que ni el calor ni el leve viento ha castigado.

De regreso a casa mucho estiramiento y a seguir mejorando.

Montequinto – Dos Hermanas

Bueno tras un parón de 37 días ocasionado por el accidente de tráfico que tuve hoy he vuelto a pedalear. En realidad ya he cogido dos veces antes la bici pero era yendo con mi hija a dar vueltas a la manzana o el parque.

Me lo he tomado con mucha tranquilidad ya que no se como me va a reaccionar el cuello. Tan solo he hecho 20 km. pero la idea debe ser ir progresando poquito a poco.

He salido hacia Dos Hermanas por la carretera de la Guardia Civil en dirección al  hipódromo y he bajado hacia el núcleo principal. Al llegar sigo recto hasta llegar a la av. de España que la circulo  tan sólo una rotonda ya que sigo recto en busca de la salida de la ciudad hacia el Tanatorio. Vuelvo de nuevo a circular por carretera con menos tráfico y veo como la zona de entrenúcleos empieza ya a edificarse. Subo hacia Montequinto por la av. de siempre y sigo hasta llegar cerca de la Pablo de Olavide. Giro al llegar al Instituto de la Montaña y ya me encamino hacia casa.

Pocos km. y aunque en las piernas no siento el cansancio por la inactividad el cuello si lo noto cargado.

Coripe – La Muela – Sierra de Lijar (Mogote)

Por fin volvemos de nuevo a Coripe para ir en busca del Mogote. Quedamos en la BP de Montequinto Eduardo, José (compadre), Alex, Paco, Julián y yo ya que Mario ayer se dio de baja y José Carlos y Julio, su hermano, van directo a Coripe.

Tras el largo viaje salimos de los coches y el fresquito se hace notar. Arreglamos un pinchazo de Eduardo mientras llegan José Carlos y Julio. A su llegar nos montamos en las bicis y empezamos nuestra ruta.

Salimos de la Vía Verde para coger la carretera A-8127 y ascendemos el Puerto de la Araña aunque es más conocido en la zona por el Puerto del Castaño. Son 5 km. con una pendiente media del 5,2% que contando que tiene una pequeña bajada podría ser peor. Subimos todos juntos, es decir, sin gastar más de la cuenta ya que el Mogote nos necesita a tope.

Tras llegar a la cima una ligera bajada para seguir otro km. en ligero ascenso hasta llegar al cruce de La Muela donde nos encontramos un muro de 300 mts. al 15,2% de media, que solo le falta que fuese adoquinado para parecerse al Tour de Flandes. Resoplamos en la cumbre y bajada súper rápida hasta ésta pedanía.

Solamente llevamos 8 km. pero el desayuno nos espera. Tras comer y charlar un poco nos vamos preparando mirando en la lejanía lo que hay que subir. La salida sigue en bajada por la carretera CA-9101 hasta el inicio de la subida.

Paramos todos unos segundos y como nadie quiere arrancar salgo e intento conseguir la idea que llevaba en mente, bajar de 1:03:16 que fue el tiempo empleado la anterior vez. Para poder guiarme llevo una tabla con los tiempos por km. Si voy bien sigo con el esfuerzo y sino, pues llegar arriba disfrutando de la subida.

El primer km., 7,7% media, ha variado de la última vez ya que lo han hormigonado por completo con lo que ayuda bastante. A la llegada del primer km. miro el tiempo y me quedo alucinado, he bajado 34 segundos. Me crezco pero de repente me digo haber si va a ser por el hormigonado. Templo los nervios y respiración y continúo la marcha. Comienzo el 2º km., 5% media, que baja su media ya que tiene un descansillo en ligera bajada que te da un buen momento para respirar ya que más adelante va a ser difícil. A la llegada del km. miro el tiempo y lo bajo 22 segundos. Siguen siendo más de los esperado pero mi idea del anterior km. por el hormigonado se incrementa.

El tercer km., 7,8% media, es posiblemente de los más duros. Tiene un tramo hormigonado bastante largo y hormigón significa dureza. Al llegar a su final miro tiempo y lo bajo en 55 segundos. Por la cabeza mi nueva idea no es bajar la marca, sino bajar de la hora. El 4º km., 7,5% media, sigue siendo duro pero la cabeza me lleva en volandas. Al llegar al final miro el cronómetro y bajo de nuevo 57 segundos.

El 5º km., 8,2% media, es muy duro aunque no tiene rampas superiores al 10% con lo que una vez coges ritmo es asequible. De vez en cuando miro hacia atrás pero no veo a nadie. Llego al km. y bajo otros 32 segundos. La cosa va mucho mejor de lo esperado. Si no tengo avería o problemas con mi rodilla lo debo de conseguir. El 6º km., 7,6% media, arranca con una rampa del 16% que es la que hace subir mucho la media ya que después es más o menos llevable. Al final del km. miro el tiempo y lo bajo 2:04. Montado a veces pienso si estaré mirando bien el tiempo o si lo saqué bien del ordenador.

El 7º km., 4,3% media, es muy agradecido y hace que la velocidad se eleve. Ya me encuentro en la otra cara de la montaña. Al final del km. el tiempo me marca que de nuevo he bajado 43 segundos. El 8º km., 8,4% media, es el más duro físicamente y psicológicamente. Se viene ascendiendo ligeramente pero llega una rampa hormigonada del 17,5% en una línea recta que te hunde por que no llega su final. Por fin la paso y entro en terreno más fácil. Al llegar al km. rebajo 1:14.

Llego ya a la zona más fácil. es un altiplano ascendente que me ha de llevar a la cumbre. El 9º km., 4,7% media, acelero lo que puedo para intentar bajar todo lo posible el tiempo. Este km. lo bajo en 58 segundos y me lanzo por el final de la ascensión que son 700 mts., 4,1% media, donde acelero lo que puedo y bajo el tiempo en 1:14.

Al final hago cumbre en 53:45. ¡INCREIBLE!

Espero a que mis compañeros vayan llegando y los primeros en aparecer, son Paco que me lo imaginaba y José Carlos, tan solo 10 minutos después. Nos hacemos unas fotos y cuando decidimos bajar por que parece que nadie mas va a llegar, aparece Alex con el que nos hacemos otras fotos. Alex ha llegado a los 20 minutos y muy bien para ser la primera vez.

Alex, José Carlos y yo

Paco y José Carlos  

Tras las fotos para abajo, y cuando llegamos a la bajada hormigonada vemos a Julián, Eduardo y José subiendo. Los acompaño hasta arriba, José Carlos va en busca de su hermano y Paco y Alex se pone a buscar caminos. Llegamos a la cumbre 52 minutos más tarde de nuevo. Estoy muy contento ya que Eduardo se que es capaz de subir ésta cuesta, pero últimamente en las salidas un poco duras se venía abajo, con lo que verlo arriba me hizo muy feliz. Al igual que su compadre. Bueno y Julián se merece una mención especial. Tras meses inactivo y para empezar subirse éste pedazo de puerto es de “chapeau”.

 

Julián y yo

 

José y Eduardo

Tras unas fotos nos lanzamos para abajo y al km. de bajar vemos a Julio que también está arriba. Julio lo ha tenido que pasar mal ya que Julián me comentó que en una rampa de mucha pendiente se quedó parado y no le dio tiempo a sacar los pies y se pegó una buena caída, aunque al final ha llegado arriba.

Seguimos en nuestra bajada que la hago con José Carlos y al rato escucho una bici por detrás pero no llego bien a saber quien es. Abajo veo que era José. Esperamos un buen rato y me suena el móvil. Es Eduardo preguntando si su compadre está con nosotros. La sangre no le llega bien al cerebro ya que ni se ha dado cuenta que iba delante suyo. Seguimos esperando abajo y siguen llegando, primero Eduardo y Julián y después Julio. Los que tardan media hora en llegar son Paco y Alex, con lo que la ruta cambia de rumbo y decidimos volver por donde hemos venido.

Lo único malo es que queda 1,8 km. ascendentes donde acumulamos 141 mts. pero lo peor es la salida de La Muela donde nos encontramos un rampa de 800 mts. al 9,6% de media que nos deja muy chafados. Tanto que Alex revienta y decide esperar en La Muela a que le recojan en el coche. Menos mal que ahora bajamos en la mayoría del tiempo, el Puerto del Castaño.

Me lanzo en la bajada hasta que Paco me da un pasote y José Carlos al instante igual. Yo para no perderlos tengo que ponerme de pie para sprintar sobre la bici, ya que ellos cogen la curva mejor o sin miedo. Menos mal que a falta de 1,3 km. viene un repecho de unos 300 mts. donde los cojo y les ataco a hierro. Me dejo caer y llego muy rápido al coche.

Van llegando el resto y a montar las bicis en los coches y para casa que es muy tarde.